El mandatario del régimen venezolano, Nicolás Maduro, amparó la designación de los miembros del nuevo Consejo Nacional Electoral (CNE) por parte del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) como una “una decisión consensuada”. Los nombramientos se concretaron cuando la Corte chavista le arrebató la competencia de selección de rectores del CNE a la Asamblea Nacional, controlada por la oposición.
“Saludo la decisión sabia, necesaria y constitucional del TSJ, que ante la omisión de la Asamblea Nacional, designó a los rectores principales y suplentes del Poder Electoral. Llamo al pueblo a respaldar y a optar siempre por el camino democrático. ¡Vamos a Elecciones!”, escribió en Twitter Maduro, anunciando así nuevos comicios.
Según se precisa en una nota publicada por Infobae, el dictador chavista afirmó que “el nuevo CNE es el resultado del proceso de diálogo a través de dos mesas con bloques de las oposición: uno, representado por Claudio Fermín, Timoteo Zambrano, Henry Falcón y Javier Bertucci, entre otros y, otro que agrupa al G4 donde están Acción Democrática, Primero Justicia, Voluntad Popular y Un Nuevo Tiempo”.
“Me reuní con todos”, dijo en conversación con la televisión pública venezolana. “Hasta con el bobolongo tuvimos contacto”, apuntó en referencia al presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, elegido diputado por el partido Voluntad Popular.
El propio Guaidó desmintió estos contactos y afirmó que el nombramiento es ilegal: “Están cometiendo un claro delito y un error político. Se equivocaron en 2017 con una falsa Asamblea Constituyente y una falsa elección en 2018”, declaró.
“Desde el 2018 no nos hemos prestado para ninguna farsa. Desconocemos cualquier falso CNE nombrado por la dictadura. Utilizaremos esta decisión de la dictadura para decirle a la comunidad internacional que es necesario un nuevo nivel de presión”, afirmó Guaidó, a la vez que concluía: “No vamos a apoyar a ningún fraude electoral. No se trata de participar, sino de pasar a la ofensiva de exigir y reclamar”.
Maduro aseguró la legalidad de los nombramientos de nuevos integrantes del CNE, “gente de gran trayectoria”, subrayó, ignorando que algunos de los designados, como la flamante presidenta -ex jueza de la corte chavista- Indira Alfonzo, fue sancionada en mayo de 2018 por el Gobierno de Canadá “en respuesta a las elecciones presidenciales ilegítimas y antidemocráticas” que se celebraron entonces y en las que Nicolás Maduro fue reelegido como presidente.
En aquel entonces el Ministerio de Asuntos Exteriores de Canadá refirió que Alfonzo, y otras trece personas cercanas al Gobierno chavista, son “individuos responsables del empeoramiento de la democracia en Venezuela”.
El dictador venezolano tampoco mencionó al nuevo rector suplente, el cirujano Luis Fuenmayor Toro, conocido por negar el holocausto y acusado de abuso sexual de menores.
Maduro, en cambio, ordenó a su Ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, que comience a organizando el Plan República para la celebración de los comicios. Resumió Infobae sus arengas al respecto:
“Acataremos las decisiones del nuevo CNE”, ha aseverado, al tiempo que ha llamado a abrazar la vía electoral porque “están dadas todas las condiciones”. “Vamos, que cada quien presente sus planchas (listas), sus candidatos (...). Vamos a las elecciones”.
