Enfermero mexicano traficante de órganos asesinó a una familia que le reclamó un riñón que no les entregó
La familia le había pagado 500,000 pesos por el órgano, pero al no recibirlo, exigieron una explicación, lo que llevó a los asesinatos.
Actualizado: Mon, 06/24/2024 - 20:42
En México más de 21,000 personas esperan un trasplante de órgano o tejido, y el mercado ilegal se ha convertido en una opción peligrosa para quienes buscan una segunda oportunidad de vida. Este submundo se cobró la vida de la familia Romero en Chihuahua.
Hace seis años, la familia Romero fue asesinada por Jorge Alberto, un enfermero auxiliar del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). De acuerdo con la Fiscalía de Chihuahua, el 29 de junio de 2018, Jorge Alberto acudió a la casa de las víctimas acompañado de su esposa e hijo y, tras una pelea por un riñón que nunca entregó, abrió fuego contra ellos.
Jorge Alberto ha sido condenado a 172 años y seis meses de prisión por los homicidios de cinco miembros de la familia Romero. Además, se le impuso un pago de 9.5 millones de pesos como reparación del daño material.
El caso de Jorge Alberto revela un modus operandi macabro que involucraba la promesa de órganos y plazas laborales a cambio de dinero. Con un sueldo modesto como auxiliar de enfermería, su lujoso estilo de vida –incluyendo al menos 10 autos de lujo– despertaba sospechas. Según investigaciones, operaba con la complicidad de un médico no identificado y Juan A., encargado de la Bolsa de Trabajo en el IMSS, quien facilitaba puestos a quienes pagaban al enfermero.
La desesperación de quienes estaban al final de la lista de espera llevó a muchas personas a recurrir a él. Prometía conseguir órganos y realizar trasplantes en la institución, pero en muchos casos no cumplía, lo que provocaba reclamos que solía silenciar con la muerte.
Este no fue el único crimen de Jorge Alberto. En diciembre de 2017, asesinó a una mujer que le reclamó por una plaza de trabajo prometida a cambio de dinero. Desde 2022, cumple una condena por este homicidio.
Aunque Jorge Alberto está tras las rejas, su esposa y su hijo quedaron en libertad, decisión que la Fiscalía planea apelar. La esposa se encuentra actualmente prófuga.
