La muerte prematura del beisbolista cubano Andy Pacheco en República Dominicana ha provocado profundo pesar como lo confirman decenas de mensajes de condolencias en la página de Facebook del atleta.
“El Cerro está de luto” escribió uno de sus amigos en alusión al barrio habanero que lo vio crecer, cercano al estadio Latinoamericano.
Desde horas tempranas de este jueves todos los medios dominicanos de información se hicieron eco de la tragedia.
Pacheco, 23 años, falleció en un accidente de tránsito ocurrido cerca de la medianoche del jueves en la carretera Jubey, frente a la Academia de los Reales de Kansas City, en el cruce hacia Boca Chica a unos 35 kilómetros de Santo Domingo.
El cuerpo de bomberos de Boca Chica confirmó a Listín Diario, que cuando las unidades de emergencia llegaron al lugar del choque ya Pacheco había fallecido.
El pelotero jugaba la tercera base del equipo Los Andulleros de Santiago para la Liga de Verano del Cibao, “con la vista puesta en las Grandes Ligas” afirmó el diario.
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De acuerdo con el Diario, Pacheco estaba en la parte trasera del vehículo, detrás del conductor y viajaba junto a otras tres personas aún no identificadas, quienes resultaron heridas y fueron trasladados a un centro de salud.
Un agente que participó en el operativo dijo a la agencia EFE que Pacheco “llevaba puesto el cinturón de seguridad” y hubo que cortar ese dispositivo de retención para sacar el cadáver del vehículo y trasladarlo al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacid).
Los otros ocupantes del vehículo “se encontraban fuera del automóvil” cuando los servicios de emergencia llegaron al lugar del siniestro.
Según las primeras hipótesis, el accidente se produjo porque el conductor perdió el control del automóvil, indicó el agente de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett).
“Este muchacho estuvo jugando con nosotros. Buscaba un futuro mejor para él y para su familia” afirmó el presidente de la Federación Dominicana de Béisbol, Juan Núñez Nepomuceno.
Darío Medrano, gerente del club, lamentó el fallecimiento del pelotero y dijo que era un gran jugador y muy disciplinado. Señaló, además, que Pacheco era el único que tenía puesto el cinturón, por lo que no se explica su muerte.
Informes sin confirmar indican que el vehículo en que se trasladaba el cubano era conducido por Sergio de Luna, quien trabaja para los Reales de Kansas.
El joven Pacheco integró la selección cubana campeona en el Campeonato Panamericano y en la Serie del Caribe para 15-16 años, y fue plata en un Mundial juvenil en Venezuela