Durante las semanas en que la pandemia del nuevo coronavirus ha detenido las acciones de las Grandes Ligas de béisbol en Estados Unidos (MLB), los especialistas de su sitio web han analizado los mejores jugadores por posición en cada una de las 30 franquicias.
En un reciente reporte a cargo del periodista Do-Hyoung Park, el nombre del cubano Antonio “Tony” Oliva encabezó el apartado de los mejores jardineros derechos de todos los tiempos en la franquicia de los Minnesota Twins.
El primer mérito que destacaron sobre la carrera del pinareño de 82 años, fue el hecho de ser «el único miembro de la organización que ha estado en el dugout las tres veces que el equipo ha ganado el banderín de la Liga Americana», al lograrlo como jugador en 1965 y fungir como coach en los éxitos de 1987 y 1991.
Individualmente, destaca el reporte, Tony Oliva brilló desde su temporada de novato, al convertirse en el primer jugador en ganar un título de bateo en su primer año en la liga (algo que igualaría en 2001 el japonés Ichiro Suzuki), con línea ofensiva de .323/.359/.557, así como 32 jonrones, 42 dobles y 12 bases robadas.
De ahí en adelante, el cubano encadenó ocho sensacionales temporadas en el mejor béisbol del mundo, logrando en ese lapso un Guante de Oro en el jardín derecho, cinco temporadas de 20 o más jonrones, siete de 30 o más dobles y liderando en jits la Liga Americana en tres campañas consecutivas.
Según el investigador de béisbol, Francys Romero, Oliva fue uno de los primeros peloteros cubanos en salir de la isla en 1961, luego de que las convulsas relaciones del deporte profesional con el nuevo gobierno socialista llegaran a su estadio final.
Según Romero, la separación de sus seres queridos —incluidos sus hermanos Juan Carlos y Reynaldo, también peloteros— fue una herida que acompañó siempre al exitoso Oliva, hasta que pudo regresar de visita por primera vez a su natal poblado de Corralito, en 1971.
Una lesión de rodilla sufrida a principios de la década de los setenta marcó el comienzo del fin para Oliva, pero «la llegada de la regla del bateador designado en 1973 ayudó a prolongar su carrera de 15 años», escribió Do-Hyoung Park.
«Oliva se retiró después de la campaña de 1976 con 1,917 hits, 220 cuadrangulares – cuarto en la historia de los Mellizos—y un promedio de bateo de .304, el mejor de la historia entre los jugadores nacidos en Cuba. Desde entonces, su número fue retirado», enfatizó el reporte de MLB. «Oliva fue exaltado al Salón de la Fama de los Mellizos y sigue siendo una persona activa dentro de la organización y un favorito de la afición.»
Además de Oliva, los cubanos Bert Campaneris en Oakland Athletics y Orestes “Minnie” Miñoso en Chicago White Sox, también fueron seleccionados como mejores en sus franquicias en el campo corto y el jardín izquierdo, respectivamente, en la serie de artículos que publica por estos días el sitio de las Grandes Ligas.