El partido entre el Newcastle y el Tottenham tuvo que ser suspendido por unos minutos antes de que finalizara el primer tiempo, debido a que un aficionado sufrió un ataque cardíaco y el equipo médico del equipo local tuvieron que atenderlo con un desfibrilador.
Cuando el aficionado se desvaneció en la tribuna, el lateral del conjunto londinense, el español Sergio Reguilón, llamó la atención del árbitro Andre Marriner al tiempo que su compañero, el central Eric Dier, acudió a los banquillos para que algún miembro del cuerpo médico acudiera a atender al aficionado.
Uno de los doctores del Newcastle atravesó el terreno de juego con un desfibrilador en la mano para socorrer al aficionado que fue reanimado.
Mientras atendían a la persona afectada, los dos equipos abandonaron el terreno de juego.
El Newcastle advirtió en redes sociales de la situación. "El juego se suspenderá hasta que se resuelva la emergencia médica. Mientras tanto, enviamos nuestros mejores deseos a esa persona y a aquellos que están sufriendo en el otro lado", apuntó.
Finalmente y luego de 20 minutos, el partido pudo reanudarse. Por otra parte, el aficionado reaccionó y rápidamente fue trasladado al hospital y actualmente está estable.
El encuentro, que terminó perdiendo el Newcastle 2-3, es el primer partido de los ingleses con los nuevos dueños de fondo de inversión saudí, y a pesar de que se encuentra en zona de descenso, se espera que con la inyección de capital, muy pronto pueda revertir la situación y comience a pelear de tú a tú contra los grandes de Inglaterra.
El equipo de las Urracas fue adquirido en un 100% por el Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudita, después de haberse caído la compra del club hace año y medio por un conflicto de derechos audiovisuales y se convirtió así en el equipo más rico del mundo.
Newcastle se ubica en la décimo novena posición de la tabla con solo tres puntos y sigue sin conseguir la primera victoria, mientras que el Tottenham se encuentra en el quinto lugar con 15 unidades.
