“Fue un asesinato”: habla sobreviviente del hundimiento de la lancha en Bahía Honda

Una de las personas que salvaron su vida tras la colisión el sábado 29 de octubre de una embarcación de Tropas Guardafronteras (TGF) contra una lancha de migrantes cubanos asegura que “fue un asesinato”. El hundimiento ocurrió en Bahía Honda, provincia de Artemisa, y hasta el momento se ha identificado a seis fallecidos, incluida una niña.

La “sobreviviente del hundimiento de una lancha en Cuba culpa categóricamente al régimen y los agentes [de Tropas] Guardafronteras de la muerte” de varias personas, afirmó la periodista Maylín Legañoa, del canal Telemundo 51, quien publicó en redes sociales parte del testimonio.

“Lo que hicieron con nosotros fue un asesinato. Nos tiraron a matar. (…) No hubo compasión por nada”, afirma la fuente, cuyas palabras serán reveladas completamente este lunes a las 11:00 pm, en exclusiva por Telemundo 51.

La embarcación de Guardafronteras “le dio por el medio [a la de migrantes], pero no por el lado de nosotros, sino por el otro”, se escucha decir a una mujer, cuya imagen fue distorsionada para proteger su identidad.

De acuerdo con la testigo, la lancha con migrantes salió rumbo a EE. UU. y la colisión habría ocurrido a “unos 200 metros” de la orilla.

“A una de las muchachas que se murieron, la misma propela [hélice del motor] la molió cuando la lancha nos atravesó”, asegura la fuente. Agrega que, de las ocho mujeres que intentaron salir del país, “ninguna sabíamos nadar”.

Tras el incidente, la Fundación para los Derechos Humanos en Cuba (FHRC) incluyó en su lista de “represores cubanos” a varios oficiales de las Tropas Guardafronteras, a quienes responsabilizó por el hundimiento de la lancha con migrantes.

Entre los señalados como “represores violentos” están los tenientes coroneles Leovanys Cutiño Rodríguez y Raidel Rodríguez López, jefe del Estado Mayor y jefe de Operaciones, respectivamente, del Destacamento Noroccidental de Guardafronteras, que incluye la zona de Bahía Honda.

La ONG afirmó en un comunicado que lo ocurrido en Bahía Honda con la embarcación proveniente de Florida no fue un accidente, como sugirió el Ministerio del Interior cubano en su versión de los hechos, sino un “asesinato a sangre fría”.

“Los sobrevivientes aseguran que fueron hundidos a propósito. La historia también confirma que este es solo otro crimen de lesa humanidad perpetrado a sangre fría en la soledad del mar por el régimen comunista”, subrayó la entidad.

La FHRC informó el domingo que tres personas continuaban desaparecidas de los 23 pasajeros de la lancha. Precisó que otros agentes del Estado también han sido responsabilizados por hechos similares ocurridos en el pasado, como el hundimiento del remolcador “13 de marzo” en 1994, entre ellos el general de Brigada retirado Lázaro Román Rodríguez, jefe de TGF hasta octubre de 2020; el actual jefe de ese cuerpo, Jorge Argelio Samper, y Jorge Luis Navarro Nolasco, jefe del Destacamento Noroccidental.

A raíz del hundimiento en Bahía Honda, fue recordado el crimen del 13 de julio de 1994, contra los civiles que intentaban migrar a bordo del remolcador “13 de Marzo”, rumbo a EE. UU. Ese día murieron, al menos, 37 personas ante los ojos de los guardacostas cubanos, que no intervinieron para frenar el ataque de embarcaciones leales al gobierno.

Sobre ese hecho, Fidel Castro se negó a abrir una investigación oficial a pesar de las peticiones de organismos internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y Amnistía Internacional.