Piden apoyo para Brenda Díaz, presa política del 11J juzgada por segunda vez

La presa política cubana Brenda Díaz es juzgada por segunda vez este viernes en el tribunal de Güines, en la provincia de Mayabeque. Anteriormente había recibido una condena de 14 años de privación de libertad por manifestarse pacíficamente en las históricas protestas antigubernamentales de julio de 2021.

El activista Marcel Valdés advirtió en Twitter que Díaz se encuentra en la cárcel Cuba-Panamá, “donde ha sido reprimida por los guardias del penal” y explicó que el nuevo “juicio arbitrario que le quieren hacer fue porque el oficial que se hace llamar Frank, la golpeó”.

Valdés detalló que, después de la agresión a Brenda, las autoridades carcelarias la enviaron a una celda de castigo durante 15 días y la acusaron de ꞌdesacatoꞌ”. “La volverán a juzgar por un crimen donde ella vuelve a ser la víctima”, denunció el activista.  

“Hagamos esto viral para que la dictadura entienda que Brenda no está sola”, pidió el opositor cubano.

Por su parte, Ana María García, la madre de la prisionera política, también manifestó: “lo que no entiendo, si mi hija fue golpeada brutalmente y llevada por 15 días a celda de castigo, sea ella quien tiene que pagar. BASTA YA, ¿HASTA CUÁNDO?"

La manifestante llegó al juicio esposada con las cadenas conocidas como “shakiras”. En el Tribunal Municipal Popular de Güines no permitieron la comparecencia de los testigos de la defensa, dijo la madre a Radio Martí.

García señaló que a su hija se le imputa el cargo de “desacato” y que los testigos de la defensa no fueron citados por el tribunal.

“Ya Brenda llegó, como siempre, esposada con shakiras, y con todos los desastres que hace el gobierno este. Ahora estuve hablando con el abogado y dice (…) que tenemos cosas que no están a nuestro favor, porque le denegaron los testigos”, señaló García antes de iniciar el juicio. Explicó que “los testigos que vieron cuando a Brenda le dieron golpes son reclusos y el tribunal los denegó”

García contó a ADN Cuba que el 12 de febrero de 2023 Brenda fue llevada a celda de castigo por tener un “altercado con “un guardia que entró al cubículo y la ofendió. Brenda automáticamente se defendió verbalmente, el guardia la agredió, le dio unos tonfazos y forcejearon”.

Durante 12 días la mujer trans no pudo bañarse porque no tuvo acceso a agua corriente, según denunció su mamá, quien también precisó que durante esos días “apenas pudo tomar agua, a pesar de que padece de problemas en los riñones”.

La joven ha recibido malos tratos por parte de las autoridades penitenciarias debido a su identidad de género, según denuncias de familiares, hasta el punto de que, en octubre de 2022, un guardia la lanzó por unas escaleras.

Díaz García se encuentra recluida en la sección de hombres del establecimiento penitenciario Cuba-Panamá, donde fue obligada a raparse la cabeza y vestirse como hombre.

De acuerdo con el grupo de trabajo sobre detenciones políticas Justicia 11J, Brenda, hermana de Luis Manuel Díaz García –otro detenido por las protestas de 2021–, fue acusada de lanzar piedras durante las manifestaciones en Güira de Melena. El régimen la sentenció por los supuestos delitos de “Desórdenes públicos”, “Sabotaje de carácter continuado”, “Atentado”, “Daños” y “Robo con fuerza”.

Desde las protestas masivas de julio de 2021, Justicia 11J ha registrado las detenciones de 1812 personas como parte de la respuesta estatal a distintas manifestaciones antigubernamentales. Según el grupo defensor de derechos humanos, al menos 768 cubanos continúan en prisión y 742 han sido juzgados principalmente por el 11J, la convocatoria a la Marcha Cívica por el Cambio del 15 de noviembre (2021) y las protestas de 2022 por el agravamiento de la crisis económica y social.

En total serían, al menos, 990 las personas presas y condenadas o pendientes a juicio por expresar su descontento con el régimen del Partido Comunista.