El cofundador de Microsoft y uno de los hombres más ricos del planeta, Bill Gates, envió un mensaje esperanzador a la humanidad en el cual dijo que aún “hay una ventana abierta” para luchar contra el coronavirus.
En una columna publicada en el diario estadounidense The Washington Post, Gates describió la situación que vive ese país a causa de la pandemia y cómo el gobierno había perdido la oportunidad de anticiparse a la llegada de la enfermedad.
“Pero la ventana para tomar decisiones importantes no se ha cerrado. Las elecciones que hagamos nosotros y nuestros líderes ahora tendrán un enorme impacto en qué tan pronto comienzan a bajar los números de casos, cuánto tiempo la economía permanece cerrada y cuántos estadounidenses tendrán que enterrar a un ser querido debido a COVID-19”, escribió el magnate de las tecnologías.
Sus constantes enfoques críticos hacia la gestión de los líderes mundiales con respecto al medio ambiente, le han convertido en una de las principales voces de este movimiento: “A través de mi trabajo con la Fundación Gates, he hablado con expertos y líderes en Washington y en todo el país. Me ha quedado claro que debemos dar tres pasos”, advirtió.
“Primero, necesitamos un enfoque nacional consistente para cerrar. A pesar de las instancias de los expertos en salud pública, algunos estados y condados no han cerrado por completo. Debido a que las personas todavía pueden viajar libremente a través de las fronteras estatales, también puede hacerlo el virus”, expuso el empresario.
Como segundo paso, Gates recomendó al gobierno de Estados Unidos aumentar el número de pruebas, algo que la Casa Blanca dice estar llevando a cabo. “Muchas más pruebas deben estar disponibles. También debemos agregar los resultados para poder identificar rápidamente a los voluntarios potenciales para los ensayos clínicos y saber con confianza cuándo es el momento de volver a la normalidad”.
En este sentido, elogió el aumento de la capacidad de pruebas del estado de Nueva York en días recientes, así como la implementación de un sistema en Seattle, donde se reportó el primer caso del país, mediante el cual los pacientes pueden realizarse la prueba sin exponer a un profesional de la salud.
“Finalmente, necesitamos un enfoque basado en datos para desarrollar tratamientos y una vacuna”, recomendó Bill Gates en su artículo. “Los científicos están trabajando a toda velocidad en ambos, mientras tanto, los líderes pueden ayudar al no alimentar rumores o compras de pánico”, esto último en referencia a la acumulación del fármaco hidroxicloroquina por parte de las personas sin que se probase aún su efectividad ante el coronavirus.
Por último, Gates lanzó una advertencia para las naciones que no poseen todos los recursos ante la inminente necesidad de una vacuna: “Sin una vacuna, los países en desarrollo corren un riesgo aún mayor que los ricos, porque es aún más difícil para ellos hacer distanciamiento físico y paros”.