De los 5 mil 87 extranjeros que permanecen varados en Cuba en medio de la actual contingencia sanitaria, cifra dada a conocer este miércoles por el Ministerio de Salud Pública de la isla, en su ya habitual conferencia de prensa matutina, 32 son costarricenses.
La mayor de las Antillas es uno de los destinos donde más personas de esa nacionalidad quedaron atrapadas tras los respectivos cierres de fronteras de los países como principal medida frente a la importación inicial de casos de COVID-19.
Además de en Cuba, decenas de ticos están varados en países como Estados Unidos, donde hay 129; Alemania, 19; Argentina, 43; Bélgica, 12; Brasil, 64; Guatemala, 22; México, 41; y Perú, 32.
En total, 659 costarricenses siguen en otros países y piden ayuda para volver a su tierra. Según reporta Tele Tica, “los viajeros quedaron aislados porque la pandemia los tomó en otro país por condiciones de trabajo, estudio o simplemente porque andaban de paseo”.
Muchos costarricenses han logrado volver a su país gracias a las coordinaciones de embajadas y consulados con la Cancillería, una historia y proceder que se repite en casi todos los países que tienen connacionales atrapados en otras latitudes.
“Otros aún se mantienen a la espera de ayuda o, sobretodo, del transporte aéreo para volver al país, ya que las líneas aéreas no están operando”, destaca el citado medio, que precisa que, según la Cancillería costarricense, han logrado regresas a mil 221 ticos “gracias a la coordinación con gobiernos donde se encuentran los costarricenses y también por la coordinación de vuelos humanitarios en algunos casos y otros pagados que se han concretado en las últimas semanas”.
Costa Rica ha sido uno de los países más celebrados en la región por su gestión y enfrentamiento a la pandemia de COVID-19. Hasta este miércoles, según datos recogidos en el mapa de la universidad John Hopkins de Baltimore, Estados Unidos, el país sólo registra 681 casos confirmados y seis decesos por causa de la enfermedad que tiene de cabeza a todo el mundo, y que amenaza con sumirlo en una crisis económica inimaginable tan sólo tres meses atrás.