Miami Dade comenzará a abrir gradualmente en las próximas semanas según informó su alcalde Carlos Gímenez este jueves en una reunión de la comisión del condado. Actualmente se trabaja en un borrador de las nuevas medidas a aplicar en cada negocio.
La fase uno de lo que se ha llamado la “nueva normalidad” aún se desconoce cuándo llegará al condado, aunque ya existe un listado de las medidas higiénicas a seguir en lo que resta de mayo.
Entre las medidas a implementar en los restaurantes de la zona está el respeto al distanciamiento social con las mesas separadas a seis pies. En una primera fase los centros gastronómicos solo podrán tener un 50 por ciento de clientes. En otros condados de Florida solo podrán atender al 25 por ciento. Además, los negocios que presenten asientos exteriores pueden usarlos siempre que cumplan las normativas vigentes.
Gímenez aclaró, como refiere televisora local América TeVé, que seguirá los consejos de las autoridades sanitarias para iniciar una apertura gradual del condado.
A inicios de la semana pasada el Gobernador de Florida, Ron DeSantis, aseguró que el estado abrirá tras el cierre económico del Coronavirus con "pasos pequeños", y que cada región lo hará en diferentes momentos, de acuerdo con sus tasas de contagio.
Sin embargó señaló que Miami-Dade y el resto del sur de la Florida deben abrir más tardía y lentamente, puesto que tienen la mayor tasa de contagios del estado. Dijo que la situación en el sur de la Florida difiere mucho de la del resto de la península. "Realmente el resto del estado ha manejado esto muy bien. Nunca ha habido un estrés cercano en la capacidad de los recursos de atención médica”.
De acuerdo con el gobernador, en la primera fase de la reapertura las escuelas y negocios no esenciales seguirán cerrados y las personas serán alentadas a quedarse en sus hogares.
Según DeSantis, un enfoque lento le permitiría al estado manejar nuevos brotes de la COVID-19 que puedan surgir tras la relajación de las medidas de confinamiento y cierre de negocios no esenciales.
A raíz de la propagación del coronavirus en Florida y específicamente en Miami se decretó a finales de marzo el cierre total de las playas y parques del condado para impedir el avance de la enfermedad. En su orden ejecutiva, Carlos Giménez también ordenó el cierre de los establecimientos minoristas y comerciales no esenciales.
También se clausuraron todas las instalaciones recreativas en las áreas incorporadas y no incorporadas del condado de Miami-Dade. Solo se mantuvieron abiertas las estaciones de servicio, farmacias, supermercados, tiendas de conveniencia, oficinas de médicos, bancos e instalaciones para el cuidado de niños y ancianos. Algunos restaurantes solo mantuvieron los servicios para recogida y entrega de comida.
Ayer el condado Miami-Dade presentaba un total de 13,585 casos, 214 más que en la jornada anterior. La cifra de muertes llegó a 454, 22 más que el miércoles. De acuerdo a las cifras las regiones con mayor complejidad son: Miami Dade, Broward y Palm Beach.
