Una nota de prensa emitida por la Oficina del Fiscal del Distrito de Columbia dio a conocer que el cubano Alexander Alazo, de 42 años, fue acusado de múltiples delitos relacionados con el tiroteo a la Embajada de Cuba en Washington DC.
Alazo, residente en Aubrey, Texas, fue arrestado el 30 de abril de 2020 y acusado por el ataque violento contra las instalaciones de la sede diplomática. La nota precisa que el 1 de mayo, el juez G. Michael Harvey detuvo a Alazo sin fianza en espera de juicio. Ayer un Gran Jurado Federal lo acusó de cuatro delitos federales, más un cargo adicional.
De ser declarado culpable, enfrenta una sentencia de al menos diez años de prisión por descargar un arma de fuego durante un hecho de violencia.
“Elogiamos los esfuerzos de las fuerzas del orden público locales y federales que intervinieron rápidamente para proteger vidas y reducir los daños a la propiedad de un gobierno extranjero presente en Estados Unidos”, dijo el fiscal interino Michael R. Sherwin. “Esta investigación y enjuiciamiento son un testimonio del compromiso de la policía estadounidense para frustrar los esfuerzos de cualquier persona que apunte con violencia a cualquier embajada en Estados Unidos”.
La Encargada de Negocios de Estados Unidos en La Habana, Mara Tekach, dijo este jueves que las medidas judiciales contra Alazo demuestran que su país trabaja sistemáticamente con un debido proceso y que tiene un sistema judicial y de aplicación de la ley bien establecidos y coherentes con los principios democráticos.
El video de vigilancia de la embajada sobre el incidente publicado por el gobierno cubano mostró al agresor llegando en automóvil alrededor de las 2 a.m. del 30 de abril y abriendo fuego a través de una cerca con un arma automática.
Las imágenes muestran columnas de humo blanco en el aire oscuro de la noche cuando una descarga de balas golpeó el frente de la embajada, rompiendo una ventana y perforando una estatua de José Martí. Nadie resultó herido, aunque 10 diplomáticos y personal cubanos estaban adentro y las balas entraron al edificio.
Sin embargo, desde que se produjera el ataque a la sede diplomática de La Habana en Washington, el Gobierno de Cuba ha acusado en varias ocasiones a EEUU de hacer silencio, y a la Administración de Donald Trump de instigar con su "discurso de odio" esta clase de acciones, además de considerar que es "víctima de terrorismo" organizado por Washington.
Al cierre de esta nota, no hay pronunciamiento oficial de La Habana acerca del proceso penal contra Alazo.