El estado estadounidense de Florida rebasó este sábado las 7000 muertes por COVID-19 y volvió a reportar más de 9000 nuevos casos en 24 horas, mientras la preocupación mayor se centra en el paso del huracán Isaías el fin de semana por su costa este y los potenciales daños que de ello se deriven.
Con los nuevos incrementos reportados por el Departamento de Salud del estado del sol, 9642 positivos y 179 decesos, los cómputos totales de casos acumulados y muertes como consecuencia del coronavirus desde el inicio de la pandemia ascendieron a 480 028 y 7022, respectivamente.
De acuerdo con las autoridades de salud, el elevado número de fallecimientos reportados en una jornada como ésta no significa necesariamente que se hayan producido todos en las últimas 24 horas. “En Florida las muertes anunciadas pueden ser de días previos porque el departamento informa sobre nuevas muertes cuando se las reportan, pero no necesariamente son del mismo día”, detalla El Nuevo Herald en su reporte al respecto, parafraseando lo dicho por la autoridad sanitaria.
De tal suerte, esta semana a punto de terminar fue la más mortífera en el estado desde el inicio de la pandemia. Por cuatro días consecutivos se rompió el récord de muertes registradas en la demarcación y el viernes se alcanzó un pico de 257 decesos.
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Los datos proporcionados por el Departamento de Salud, con cierre en la noche del viernes, se desprenden de los resultados de los exámenes reportados la última jornada, los cuales tuvieron una tasa de positividad de 11.03 por ciento, inferior a la de 11.43 de la semana anterior, pero aún por encima del 10 por ciento deseado.
Miami-Dade continúa siendo el condado con las cifras más elevadas del estado. Con 36 muertes y 2745 contagios en la última jornada, alcanzó acumulados de 1647 y 121 207, respectivamente.
Por su parte, en Broward, el segundo de peor situación, aumentaron los casos confirmados a 56 797 y los fallecimientos a 742, luego de que se registraran otros 1386 contagios y 33 muertes.
Ambos condados, que se preveía estarían entre los potencialmente más afectados por el paso del huracán Isaías este fin de semana, lo que podría agravar aún más la situación epidemiológica, quedaron fuera del cono de trayectoria del evento meteorológico, según el boletín más reciente divulgado por el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés).
