La llamada Tarea Ordenamiento continúa exponiendo los problemas que desde hace décadas aquejan al pueblo cubano. Uno de estos es el tema de las pensiones, el cual reúne a casi dos millones de cubanos que apenas pueden cubrir sus gastos con el misero dinero que reciben.
Según el artículo "Protección urgente y personalizada", publicado hace unos días por el oficialista periódico Juventud Rebelde, el régimen tiene registrado un total de 1 700 000 pensiones, de las que en muchos casos dependen varias personas, incluso niños.
"Cuba garantiza mensualmente 1 700 000 pensiones de la Seguridad Social a familias cuya condición económica y sociocultural es precaria. Por tanto, el presupuesto destinado al amparo de esos núcleos es también millonario", publicó el citado medio estatal.
Respecto a esto el texto señala que "no obstante, el concepto de que nadie quedará desamparado no significa derrochar recursos con mirada paternalista u otorgar pensiones vitalicias, puesto que la situación puede cambiar, y el núcleo rebasar lo que ocasiona su vulnerabilidad", lo que se traduce en que el régimen puede retirar la ayuda en cuanto lo estime conveniente, algo que no es nuevo, y no surge como parte de la llamada Tarea Ordenamiento, pues son muchos los ejemplos a lo largo de estos 62 años de dictadura.
La propaganda castrista intenta hacer creer que con el nuevo aumento salarial, el cual incluye también a las pensiones, la vida de los cubanos va a mejorar, pasando por alto el incremento de precios que desde hace algunos meses vienen sufriendo todos los productos, incremento al que también ha recurrido el régimen, el cual ha hecho que a pesar de que la mayoría de los cubanos perciban más ingresos económicos, su poder adquisitivo haya decaído.
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El propio Juventud Rebelde llega a reconocer en su artículo que el aumento salarial "no resolverá todos sus problemas", pero lo dice añadiendo que "sin duda alguna, devendrá paliativo y acicate para enfrentarlos", como si los cubanos no tuvieran derecho a una vida digna, sobre todo esos ancianos que dedicaron sus vidas a la construcción del socialismo, como si se tratara de un sueño, aunque en realidad siempre ha sido una pesadilla.
Recordemos que antes de que entrara en vigencia el nuevo incremento salarial, eran miles los cubanos que malvivían con una pensión de 240, incluso muchos solo percibían eso como salario mensual con jornadas de ocho horas o más, incluso con el país teniendo mejor situación económica, porque ese es uno de los métodos de los que se ha valido el castrismo para mantenerse tanto tiempo en el poder, y ahora no se puede esperar que sea diferente.