El diario cubano Granma, órgano oficial del Partido Comunista y único de Cuba, llamó mentiroso al senador estadounidense Bob Menéndez por alegar recientemente que el régimen de la isla “es la mayor amenaza para Estados Unidos en el continente”.
En un artículo del exespía de la Seguridad del Estado Raúl Antonio Capote, a cargo de la sección internacional del medio oficialista, Granma aseguró que Cuba nunca será una amenaza y que el legislador demócrata de origen cubano miente, lo cual debe verse como una “recordación de que en el archipiélago no debe esperarse jamás nada bueno de quienes se dicen cubanos, pero no lo son ni en alma ni en apego a la tierra de sus padres”.
Para demostrar su sentencia de que Cuba no es peligrosa ni una amenaza, el medio, mediante el artículo de su vocero, acudió a exponer el número de colaboradores cubanos de la salud dispersos por el mundo, así como las acciones de pretendida solidaridad que el gobierno cubano ha ejecutado a pesar de su permanente crisis económica.
En 2005 se creó el contingente médico Henry Reeve para ayudar a los damnificados del huracán Katrina, que había devastado la ciudad de Nueva Orleans, recordó en ese sentido Granma, al tiempo que subrayó el “hito” solidario de que en 1998, cuando los huracanes Mitch y George provocaron en Centroamérica y el Caribe pérdidas humanas y materiales sin precedentes, los médicos cubanos estuvieron en primera fila ayudando a las víctimas.
“La ‘peligrosa’ Isla ha enviado más de 4 000 profesionales de la salud integrantes de las brigadas Henry Reeve hacia más de 40 países del mundo, muchos de ellos ubicados en nuestra región, para cooperar en el enfrentamiento a la pandemia de la COVID-19. Solo hasta abril de 2020, 87 países y territorios habían recibido la colaboración cubana”, destacó el medio castrista.
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Sin embargo, nada dijo de las acusaciones que importantes actores y entidades de la comunidad internacional han hecho sobre las misiones médicas cubanas, las cuales incurren en prácticas similares a las de la trata de personas y obligan a muchos médicos a desertar o mantenerse sometidos, renunciando en ocasiones hasta al 80 por ciento de lo que los gobiernos foráneos pagan por sus servicios.
Como muestra de que el régimen no es una amenaza, Granma invocó también de que en 2020, “a pesar de las campañas de descrédito y maniobras de EE.UU.”, “Cuba fue electa al Consejo de Derechos Humanos, a las juntas ejecutivas de PNUD, UNFPA Y UNOPS, a la Comisión de Población y Desarrollo, al Comité del Programa y Coordinación del ECOSOC y al Comité Ejecutivo de la OPS”.
Asimismo, resaltó el hecho de que 80 congresistas demócratas, autoridades de más de 15 ciudades, organizaciones religiosas, académicas y movimientos sociales estadounidenses hayan solicitado al presidente Joe Biden la normalización de relaciones de su gobierno con Cuba.
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“Pero Menéndez y sus colegas en el negocio de la política anticubana se consideran las voces más autorizadas para ‘aconsejar’ al presidente cómo debe comportarse con Cuba”, criticó descarnadamente el artículo, sin mencionar cuántos otros congresistas estadounidenses, gobiernos y miembros de la sociedad civil internacional acusan repetidamente a La Habana por sus continuas violaciones de los derechos humanos y las libertades de sus ciudadanos.
Lo que dijo Menéndez
En entrevista con el periodista Juan Manuel Cao, de América Teve, Bob Menéndez, jefe del comité de relaciones exteriores del Senado, consideró que Cuba es el principal enemigo político de Estados Unidos en el continente americano.
Sin disminuir la amenaza de Venezuela, el legislador afirmó que es Cuba quien tiene los tentáculos por todas las distintas partes del hemisferio.
“Ellos quizás se quieren presentar como una isla que ha sido oprimida por los Estados Unidos, pero Cuba tiene sus tentáculos todavía en la guerrilla de Colombia, que ha faltado en sus obligaciones a los acuerdos con Colombia; tiene sus tentáculos en Venezuela, en distintos lugares en el Caribe”, dijo.
