Muchos cubanos están perdiendo el miedo. Beatriz Rodríguez Martínez, cuyo caso compartió el opositor Osmani Pardo, estalló en redes sociales debido a la difícil situación que vive en su casa, junto a su hijo y esposo.
Ambos están postrados por distintas enfermedades. Su hijo es discapacitado desde que nació hace 27 años y su esposo quedó infartado y mudo; ella sola debe hacerse cargo de ambos, buscar alimentos, comida…
Pero con la crisis que se agudizó en Cuba hace tres años, esta pobre mujer debe hacer magia, como dice la voz popular, para garantizar el sustento de su hogar.
En la directa compartida en redes sociales, señaló al presidente Miguel Díaz-Canel como responsable de todo y por su falta de coherencia al prometer mejoría para los cubanos, mejoría que no ha cumplido al día de hoy.
“Mi hijo nunca comió dulces, no sabe lo que es un cumpleaños, lo que es una novia”, señaló. Según dijo, pondría en el balcón de su casa un cartel enorme, con el lema Patria y Vida, como señal de protesta.
Como el hijo de esta cubana, hay miles de casos en Cuba, que deben sobrellevar una vida de privaciones debido a que el Estado no tiene recursos para hacerse cargo de ellos. No sólo hay desabastecimiento de medicinas, sino que, en general, el sistema de atención social está colapsado.
Las críticas al sistema, dirigidas especialmente al presidente Miguel Díaz-Canel, rostro visible del sistema, se suceden día tras día en redes sociales. En general, señalan las carencias del país y la desesperación en que viven muchos cubanos, como la propia Beatriz.
Uno de los efectos más nocivos de la crisis, es la inflación, aumentada tras ordenarse la unificación monetaria y cambiaria. Además de escasos, alimentos, medicinas y bienes básicas subieron de precio, sin que el poder adquisitivo del cubano aumente.