Puede que la cantante Katy Perry ya no cultive sus redes sociales como antaño, habida cuenta de las responsabilidades que lleva asumiendo desde el pasado mes de agosto como orgullosa madre de la pequeña Daisy Dove, fruto de su más que consolidada relación sentimental con el actor Orlando Bloom.
Sin embargo, a la hora de esgrimir las razones que le han llevado a reducir notablemente su presencia en la esfera virtual, la estrella del pop no ha hecho referencia alguna a sus muchas obligaciones y al escaso tiempo libre del que dispone para compartir fotos, vídeos y reflexiones con sus seguidores de Instagram o Twitter.
Y es que la artista ha preferido arremeter directamente contra el lado más tóxico de estas plataformas y de la 'cultura' que se ha creado en torno a ellas, a fin de justificar su cada vez más escaso uso.
Para ello, la artista californiana ha recurrido curiosamente a su perfil de Twitter y se ha limitado a soltar una frase breve y rotunda, con 'hashtag' incluido: "Las redes sociales son basura, el declive de la civilización humana #He dicho lo que he dicho", ha lanzado a los casi 110 millones de de seguidores que tiene en la popular red de microblogging.
Hay que recordar que, al menos hasta hace unos años, Katy Perry era la reina absoluta de Twitter: un altavoz que no dudó en exprimir al máximo para promocionar su trabajo y estrechar lazos con su público.
A día de hoy tampoco le va nada mal en cuestión de 'followers', ya que su perfil es el tercero más seguido de todo el mundo, siendo superado únicamente por el del expresidente Barack Obama y el también cantante Justin Bieber.
