El terremoto de magnitud 7,2 que estremeció Haití el día sábado y que mató a más de 1.400 personas, fue lo suficientemente fuerte como para ser registrado por estaciones sísmicas de Estados Unidos.
Entre las primeras agencias estadounidenses que reportaron la detección del sismo fue el Servicio Geológico de Alabama. “Las ondas sísmicas tardaron un poco más de 3 minutos en llegar a Alabama”, escribió la agencia en su cuenta de Facebook.
Las ligeras vibraciones duraron casi 50 minutos después de que viajaran casi 1.300 millas desde Haití hasta el estado, según un mapa de vibraciones compartido por las Instituciones Incorporadas para la Investigación Sismológica (IRIS, por sus siglas en inglés).
El sismo no fue perceptible para los ciudadanos, pero la agencia explica de qué manera las ondas generadas por un terremoto viajan a través de la tierra.
“Las ondas generadas por un terremoto viajan alrededor y a través de la tierra, pero se hacen más pequeñas a medida que se alejan del epicentro, como las ondas en un estanque”, escribió IRIS en una publicación del 14 de agosto.
“Una vez que las ondas del terremoto están lo suficientemente lejos del lugar donde ocurrió, las personas ya no pueden sentirlas, pero aún pueden ser detectadas por instrumentos sísmicos sensibles”, agrega.
El terremoto de magnitud 8,2 reportado en Alaska el mes pasado también fue lo suficientemente grande como para ser registrado en todo el país, según los sismólogos.
Las ondas de ese terremoto se registraron en varias “estaciones sísmicas en Estados Unidos”, dijo IRIS.
Asimismo, tuvo impacto en las aguas subterráneas a miles de millas de distancia, en el condado de Anderson, Carolina del Sur, informó el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés).
Los cambios en los niveles de agua subterránea después de fuertes terremotos suelen ser de “varios pies o menos” y pueden provocar que los pozos se desborden o se sequen por completo, señala el USGS.
“La recuperación al nivel del agua anterior al terremoto puede ser casi instantánea, o puede llevar días o meses, o puede que no se recupere en absoluto”, finaliza la agencia.