La diputada mexicana del Partido Acción Nacional (PAN) América Rangel Lorenzana criticó ante el Congreso de ese país, que su presidente Andrés Manuel López Obrador invitara a la fiestas por la independencia al gobernante cubano Miguel Díaz-Canel.
"Cuando festejamos nada más y nada menos que los 200 años de haberse cumplido nuestra independencia como mexicanos, el señor Andrés Manuel López Obrador decidió que la figura central fuera un dictador", señaló durante su intervención refiriéndose a Díaz-Canel.
De acuerdo con Rangel Lorenzana esta invitación fue "una bofetada para los mexicanos, para los cubanos, para la libertad y la democracia".
Rangel Lorenzana denunció que el gobierno mexicano se escuda en la la llamada 'política de no intervención'.
"A las dictaduras no se les debe tener ninguna consideración ni tratar como gobiernos democráticos porque evidentemente no lo son. A las dictaduras se les tiene que repudiar; no tienen derecho a existir. Y cuando se les da el espacio que le corresponde a un gobierno legítimo, se legitima a esa dictadura. Al elogiar a un dictador López Obrador ha mostrado su verdadera cara", sentenció.
La diputada del PAN impulsa junto a su compañero de bancada Federico Döring Casar una declaratoria como "personas no gratas" a los gobernantes Miguel Díaz-Canel y Nicolás Maduro, recientemente de visita oficial en el país.
"No los queremos más aquí. No queremos que nos visiten en el futuro, ni queremos compartir siquiera el aire con ellos. Son dictadores y han hecho mucho daño a sus habitantes", indicaron.
El pasado 21 de septiembre la diputada del PAN presentó un acuerdo de 'urgente y obvia resolución' para que los diputados locales se pronuncien en contra de la visita de Díaz-Canel.
Díaz-Canel llegó el 16 de septiembre a México para participar en las fiestas patrias, que conmemoran el aniversario de su independencia y en la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños Celac. Su visita estuvo marcada por el rechazo de la comunidad cubana en ese país, quienes realizaron protestas pacíficas en Ciudad de México.
Un día después, el 17 de septiembre, llegó Maduro para participar en la cumbre de la Celac.