Las embarazadas cubanas y los niños con enfermedades crónicas en Cuba no recibieron sus dietas de leche en polvo en a primera decena de febrero porque el régimen no tiene disponibilidad para garantizarlas.
Las cifras de los afectados fueron manejadas en un texto del oficialista Granma que informa que en Cuba existen un total de 9 283 niños con enfermedades crónicas y 29 189 embarazadas con dietas médicas.
Juan Carlos Domínguez Márquez, presidente de la Organización Superior de Dirección Empresarial (OSDE) de la Industria Agroalimentaria comentó a ese medio de prensa que los pequeños de “un año a seis años, de las provincias de Pinar del Río, Artemisa, Holguín y Guantánamo, recibirán, en lugar de leche entera, leche descremada, que es a la que el país ha podido acceder. El resto de los niños de cero a un año recibirán la leche fortificada normada y la leche entera”.
El directivo agregó que la escasez de este producto no es un mal nuevo, sino que desde septiembre de 2020 la entrega ha sido afectada por “las dificultades con la importación de este producto, que radican, sobre todo, en la disponibilidad de financiamiento y de buques para hacer la travesía desde los lugares de importación, así como por el impacto del bloqueo impuesto por el Gobierno de EE. UU. a nuestro país”.
A finales de enero el Grupo Empresarial de la Industria Agroalimentaria de Cuba informó que no contaba con financiamiento para entregar la leche en polvo de las dietas médicas.
“Hay otro grupo de consumidores como las personas que tienen dietas médicas que no ha sido posible su entrega a partir de no disponer de financiamiento para asegurarlas” resalta una nota oficial de ese organismo.
Como parte del proceso inflacionario que vive la economía cubana una bolsa de leche en el mercado informal puede costar hasta mil pesos. Luego de la instauración de la Tarea Ordenamiento la economía no ha logrado recuperarse de las deficientes medidas estatales ni del impacto de la pandemia.
La situación económica actual es compleja en Cuba, el país importa el 80 por ciento de los alimentos que consume, mientras la inflación ha reducido el poder adquisitivo, tras una reforma monetaria que aumentó los salarios a inicios de 2021.
Las autoridades cubanas reconocieron el pasado mes de octubre que la Tarea Ordenamiento ha provocado una inflación del 70 % en los precios minoristas en los comercios y del 6900 % en el mercado informal.
El dólar estadounidense alcanzó la barrera de los 100 pesos al cambio en el mercado informal de divisas en Cuba, informó este 25 de enero la revista El Toque. El anuncio recorrió las redes sociales y los medios independientes en un santiamén.
Antes del 1 de enero de 2021, fecha de inicio del “ordenamiento” monetario y cambiario, el dólar se equiparaba al extinto peso cubano convertible (CUC) y se podía adquirir en el mercado informal a la tasa fija gubernamental de 25 pesos.
El “ordenamiento” y la escasez de alimentos y bienes de primera necesidad han disparado la inflación en Cuba, al punto de que la moneda nacional de la isla fue la que más se depreció en el mundo en 2021, de acuerdo con un análisis comparativo de la compañía estadounidense Bloomberg, dedicada a la asesoría y el análisis en materia financiera y bursátil.
La tendencia ha sido interpretada como un indicativo de que las personas prefieren tener dinero físico en sus manos para migrar o realizar compras en el exterior, antes que gastar en las tiendas en MLC del régimen, que venden a precios exorbitantes y cuya oferta ni siquiera satisface totalmente las necesidades de los pocos cubanos que pueden acceder a ellas.
