El perfil de Instagram de Sandro Castro no escampa, y es que al parecer el miembro de la "dinastía Castro" no ceja en su empeño de mostrarle al mundo las riquezas que goza en tanto el pueblo cubano se desgasta entre las colas, los derrumbes, las muertes y los accidentes de tránsito. Esta vez el joven "empresario de los Castro" muestra en una de sus historia otra de sus delicatessen Gourmet y le pone "Tortillón".
A juzgar por el tamaño y los ingredientes que utiliza bien pudiésemos decir que no se trata del común queso proceso, al cual accede -cuando aparece en las tiendas- el cubano promedio.
Sandro escogió para su publicación nada menos que la fecha del natalicio de José Martí, recordemos que el día anterior el derrumbe de un balcón quitó la vida a tres niñas en La Habana y precisamente el mismo día en que tiembla la tierra en Cuba.
Al parecer y a juzgar por muchas publicaciones en las redes sociales el maestro parece estar revolviéndose en su tumba teniendo en cuenta que en la misma fecha del año anterior un tornado arrasó con buena parte de la capital dejando sin hogar a muchas familias, algunas de las cuales aún no han podido levantar su vivienda.
Recordemos que Sandro Castro, nieto del fallecido dictador cubano Fidel Castro, compartió hace unos meses en su perfil de Instagram una historia en la que se muestra muy contento ante un recipiente repleto de pollo frito, y lo que parecen ser papas fritas, mientras muchos cubanos que no llevan su apellido aún lamentan la “batalla de Cuatro Caminos”.
Cuatro Caminos es un mercado habanero que cerró sus puertas pocas horas después de su apertura, pues la “masiva afluencia de público” provocó altercados que terminaron con arrestos y golpes. Los “héroes de Cuatro Caminos” solo querían comprar puré de tomate, detergente y otros productos de primera necesidad.
El joven escribió la palabra “Ruedo!!” sobre la foto de su comida, en una aparente alusión a que estaría subiendo de peso, algo que generalmente ocurre cuando las personas se alimentan con abundancia y alejados del estrés.
El nieto más farandulero de Fidel, que presume en redes cuando logra llenar de gasolina el tanque de su auto en una Habana desabastecida, fue dueño en el pasado del bar Fantaxy, cerrado luego de que se relacionara la instalación con presuntas redes de prostitución y escándalos de consumo de drogas.
El muchacho festejó los 500 años de La Habana con una historia de Instagram que incluía una imagen del nombre de su abuelo brillando en el cielo cubano en forma de fuegos artificiales, junto a la frase “Grande”.
La vida de lujos de los descendientes de la familia Castro no es secreto desde que las redes sociales comenzaron a difundir imágenes que muestran, sobre todo a los más jóvenes de esa familia, disfrutando de viajes y placeres que pueden parecer simples y asequibles para ciudadanos de otros países, pero son vistos como lujos por los cubanos comunes, cuyos salarios no suelen alcanzar ni para la comida del mes.
