Kianz nació en La Habana un abril de 1996 y creció dándole patadas al balón en las esquinas de la capital cubana y se hizo futbolista con el sueño de ser profesional.
Llegó a integrar el Equipo Cuba Sub-17 pero su destino estaba en Canadá a donde emigró con su padre (nacional de ese país) comenzando su carrera en el Vancouver Whitecaps y convirtiéndose en sexto cubano en debutar en la historia de la MLS en octubre de 2014.
Por ese entonces fue llamado a las filas de la Selección Absoluta de Canadá llegando a disputar dos partidos oficiales bajo el mando de Benito Floro.
En 2017 ficha por el Fortuna Dusseldorf y se convierte en el primer jugador de nuestro país con un contrato de Bundesliga, aunque nunca pudo debutar debido a una lesión de larga duración que hizo mella en sus posibilidades de jugar con el primer equipo.
En este verano, un equipo de la cuarta división de Alemania le contrató y Kianz no dudó ni un minuto en ir al Saarbrucken en busca de minutos competitivos dónde ha disputado 18 partidos, anotado un gol y repartido 5 asistencias en Liga.
Pero ha sido la DFB Pokal la competición que ha lanzado al mediocampista cubano a los libros de historia. Poco a poco el Saarbrucken se convirtió en la revelación de cada eliminatoria, dejando siempre en el camino a rivales de divisiones inferiores.
Este martes enfrentaban al Fortuna Dusseldorf en los cuartos de final y Kianz entraba en el minuto 18 por un compañero que se lesionó y marcaba así otro hito en su carrera, ser el primer cubano en debutar en estas instancias de la Copa. Casi inmediatamente, recogió una pelota en mitad de cancha y tras una conducción precisa habilitó a Tobias Janike para el adelantar a los locales.
El Dusseldorf terminó empatando sobre los 90 minutos y el partido, tras persistir el empate en tiempos extras, tuvo que decidirse en penales.
Kianz lanzó -y convirtió- el séptimo penal y fue la primera vez que el Saarbrucken se ponía delante en la tanda que finalmente terminaron ganando 7-6 y ganando el boleto a las semifinales en una auténtica hombrada del equipo que milita en la cuarta división.
Individualmente tengo que destacar también que el playmaker habanero ha dado las asistencias de 4 de los 5 goles que tiene su equipo en toda la DFB Pokal, una estadística sencillamente fenomenal y que habla a las claras de su calidad y visión de juego.
Su récord histórico se agigantará cuando pise el terreno en las semifinales de la Copa, se convertirá en el único cubano en disputar esa fase definitiva y aunque será extraordinariamente difícil el pase a la final, ya el modesto -pero heróico- Saarbrucken y su estrella cubana habrán dejado sus nombres en la historia de esta competición.
¡Felicidades Kianz! Desde Yo Hablo Futbol y toda la comunidad del fútbol cubano te mandamos las mejores vibras y te decimos que estamos muy orgullosos de tí.