A activista cubano residente en Uruguay le impiden salir de la isla

A Lidier Hernández, activista cubano residente en Uruguay, le fue impedido recientemente salir de Cuba. Fue uno de los que se manifestó frente a la embajada cubana en Uruguay el pasado enero, una acción que conllevó se enfrentara a comunistas de esa nación sudamericana
Lidier Hernández
 

Reproduce este artículo

Al activista cubano por los derechos humanos Lidier Hernández Sotolongo, residente formal en Uruguay, le fue impedido recientemente salir de la isla, en una nueva modalidad represiva y violatoria de las libertades individuales, que indica que incluso aquellos cubanos que residen fuera de Cuba pueden ser “regulados” a discreción y antojo del régimen.

En un mensaje de WhatsApp enviado a ADN Cuba, compañeros de Lidier han detallado que éste “se encontraba en Cuba  y a su salida le han denegado el derecho a salir del país”. “Lidier vive con la familia en Uruguay y ha participado activamente en las acciones que se han llevado a cabo para evidenciar al régimen de la isla”, agrega el mensaje, en el que además se solicita apoyo para lograr “máxima difusión para liberar a nuestro hermano y que pueda regresar con sus seres queridos a tierras de Libertad”.

#FreeLidier y #NoMasRegulados son algunas de las etiquetas con las que todos los sensibilizados con el tema pueden pronunciarse en redes sociales para exigir la liberación de Lidier, presuntamente detenido por su activismo.

Su regulación migratoria evidencia, una vez más, que al régimen le importa poco la legislación internacional  y la condición de residente o ciudadano de otro país que pueda tener algún cubano. Que alguien le resulte incómodo es motivo suficiente para retenerlo y violentar sus derechos y libertades, sin importar, en este caso, cómo queda la familia en otro país.

Lidier fue protagonista en el enfrentamiento con militantes del Partido Comunista del Uruguay frente a la embajada cubana en Montevideo, el pasado sábado 11 de enero. 

Su regulación puede ser una represalia específica a esa acción, en la que quedó evidenciado que, tanto la dictadura como sus defensores internacionales, no oyen argumentos y prefieren imponerse a base de golpes, discursos manidos y acciones represivas.

 

Relacionados