El comercio virtual sigue dando de qué hablar en Cuba. En esta ocasión se trata de dos habaneras que llevan casi un mes esperando productos de Tuenvio.cu y no reciben respuestas.
La primera de ellas es Gladys Rafuls Rafuls, vecina de la calle San Lázaro 459, entre Dolores y Tejar, en 10 de Octubre, La Habana, quien cuenta que el pasado 29 de abril hizo una compra virtual en la tienda de Cuatro Caminos, y luego el día 7 de este mes realizó otra allí mismo, según informó este 20 de mayo el diario estatal Juventud Rebelde en un artículo publicado en la columna Acuse de recibo.
"Desde el pasado 29 de abril realicé y pagué una compra virtual en Cuatro Caminos y aún no he recibido la mercancía ni me han dado razón alguna".
Gladys Rafuls advierte que al momento de hacer ambas compras se le descontó de su tarjeta, pero no ha recibido ninguno de los dos envíos.
Y como si no fuera suficiente, ha enviado cuatro mensajes a la dirección electrónica atencionalcliente@cimex.cu, pero hasta ahora no le han contestado ni una sola vez, y por teléfono es imposible establecer comunicación a cualquier hora del día y de la noche.
"Hemos recibido el silencio como respuesta", subraya la afectada, y dice que puede entender que existan demoras por la acumulación de pedidos, pero no que la desconozcan como cliente sin más ni más, como si no tuvieran que dale alguna explicarles.
El segundo caso es el de Silvia María Alonso Brizuela, residente de Esperanza 160, entre San Quintín y San Gabriel, en el Cerro, La Habana, la cual efectuó una compra virtual el pasado 29 de abril en la misma tienda de Cuatro Caminos, y aún no ha recibido ni la mercancía, ni una explicación.
Silvia María ha escrito a la dirección electrónica que aparece en la página web y también a Atención al Cliente de la corporación Cimex, y tampoco ha recibido respuesta por esas vías, y por teléfono nunca le contestan.
Es evidente que con el novedoso comercio virtual por ahora la felicidad no va a ser completa por una razón u otra. Algunos de los que han corrido con más suerte, se queja de que cuando han recibido el envío, este ha llegado sin alguno de los productos comprados, y es entonces cuando comienza la odisea, porque como hemos visto, reclamar se ha vuelto prácticamente una misión imposible.