“Deseamos una nación donde expresarse libremente no constituya un acto de valentía, sino que sea una consecuencia natural del pensamiento autónomo”, así declara en uno de sus párrafos un manifiesto publicado este 12 de abril por el Movimiento 27N.
El grupo de artistas e intelectuales, que nació tras las protestas del 27 de noviembre frente al Ministerio de Cultura (Mincult), exige en el documento un cambio de política en Cuba, que incluya libertades políticas, libertades económicas, derechos de asociación y legalización de medios de comunicación independientes.
En el texto, el 27N defiende la liberación de los presos políticos, el ejercicio pleno de los derechos consagrados en la Constitución cubana de 2019 y la Declaración Universal de Derechos Humanos, la legalización de los medios de comunicación independientes, entre otras medidas.
“Cuba requiere un cambio, y para ello necesita construir una ciudadanía más participativa y con mayor grado de conciencia de que el futuro político y económico de este país depende de nosotros mismos”, señala el documento.
Sobre la cúpula dirigente, el Manifiesto la caracterizó como “una dirección política centralizada, militar y partidista, que discrimina y anula a quienes disienten, violando sus derechos humanos”.
“Con la convicción de que ganar estos derechos comienza por la voluntad de defenderlos con valentía, instamos a todos los cubanos, dentro y fuera de Cuba, a la unión y a la paz, al entendimiento y a la comunicación, a la búsqueda de la verdad, expresando lo que pensamos y sentimos, defendiendo solidariamente a quienes son reprimidos y difamados por expresarse libremente”, concluye el texto.
El Movimiento 27N nació con motivo del plantón frente al Mincult organizado de manera espontánea por artistas e intelectuales el año pasado, para exigir a las autoridades libertades políticas y respeto a las opiniones disidentes.
Al lugar acudieron unas 400 personas que, además, protestaron por el violento desalojo de los huelguistas del Movimiento San Isidro, acuartelados y en ayuno, en su sede de Habana Vieja, un día antes.
El 27N ha promovido varias iniciativas, como la petición para destituir al ministro de Cultura, Alpidio Alonso, por haber participado de manera violenta en la represión contra miembros del Movimiento el 27 de enero de este año.
