Una cubana residente en Houston (Estados Unidos) arremetió este domingo contra el régimen de la isla porque varios policías golpearon a su hijo, según denunció en una directa de Facebook.
La usuaria que se identifica como La China López Pieri, natural de Santiago de Cuba, criticó “todo el abuso de poder y maltrato que hay en Cuba”. Estalló porque el sábado supo que a Álvaro su hijo, lo intentaron arrestar por presunta “propagación de epidemia”.
“Estaba sentado afuera de la casa de su abuela, con unos amiguitos, cuando pasa la policía y los quiere detener”, aseguró la emigrada.
Según el relato que le hicieron los familiares, el joven se negó a la detención, e intentó explicar que él vive ahí con su abuela, en el lugar donde lo encontraron.
Pero “los policías me lo golpearon, los policías le viraron el brazo, le dieron en el pecho”, denunció la madre, quien refiere que fueron tres agentes los agresores. Según López Pieri, uno de los oficiales habría amenazado a su hijo con dispararle si volvía a salir.
La cubana también criticó que en Cuba no hay “libertad de expresión, porque cuando dices lo que no está bien, entonces te quieren meter presos”. La joven madre fustigó que intenten acusar a las personas por “propagación de epidemia” cuando estén sentados fuera de sus casas, como en el caso de su hijo, mientras continúan las enormes colas para comprar alimentos, culpa en gran medida de la nefasta gestión del régimen.
“Ven mal que un muchacho joven que está cansado, obstinado, que no tiene donde salir por el lío de la pandemia, se sienta afuera de su casa y ahí ya te detienen”, añadió.
“Están actuando peor que Batista”, “Cuba es una cárcel”, y “basta de abuso” fue algo de lo dicho por la madre en su directa increpando al régimen.
Estado policial contra la COVID-19
La respuesta del gobierno a la tercera ola de coronavirus en la isla es más “rigor” en sanciones y multas, así como intensificar el patrullaje “al interior de los barrios”. Tales medidas son algunas de las que endurece el régimen en una vuelta de tuerca en la lucha contra la pandemia en Cuba, según el oficialismo, que por estos días reporta números inéditos.
El martes de la semana anterior, la cúpula del castrismo anunció “un reforzamiento de las medidas dirigidas al control de la actual situación epidemiológica”, que fueron analizadas en una reunión del presidente designado Miguel Díaz-Canel y el primer ministro Manuel Marrero, con científicos y expertos.
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En el encuentro, el ministro de Salud Pública, José Ángel Portal, informó que “a partir de la última semana del mes de enero el brote epidémico ha mantenido un patrón diferente, caracterizado por el diagnóstico de más de 5 000 casos confirmados por semana, aumentando la transmisión en territorios en los que se mostraba control de la enfermedad”.
Según el medio oficialista Granma, las disposiciones dirigidas a “robustecer el enfrentamiento a la actual situación epidemiológica en todo el territorio nacional” incluyen mejorar en las cadenas de tiendas estatales la organización, para evitar “aglomeraciones de personas para adquirir los productos”. Pero de eso no se ha visto mucho, y sí el actuar excesivo del Ministerio del Interior (Minint), al que ordenaron aumentar su protagonismo en las calles, con la justificación del agravamiento de la pandemia.
La institución deberá “garantizar el cumplimiento del cierre de fronteras entre territorios en los que se haya establecido medida de cuarentena”. También, “mantener el patrullaje en avenidas principales e intensificarlo hacia el interior de los barrios para garantizar el orden interior y el cumplimiento de las medidas de aislamiento”.
Correspondería al Minint, además, “aplicar con rigor las sanciones y multas a los padres y/o tutores que permitan la presencia de niños en las calles”, así como a quienes no usen la mascarilla sanitaria e incumplan “las medidas de distanciamiento social”, publicó el Granma.