Varios pacientes de un poblado perteneciente a La Habana, podrían estar en riesgo por negligencias cometidas por personal del centro policlínico local, al violar protocolos para prevenir el coronavirus, e incluso utilizar “productos vencidos”.
Según informó el periódico oficialista Tribuna de La Habana, “los resultados de una inspección al policlínico de Santiago de las Vegas evidenciaron deficiencias y chapucerías en el seguimiento de la epidemia en varios consultorios”.
El medio del Partido Comunista en la capital, publicó que, en una reciente reunión de autoridades del régimen, reconocieron que en esa localidad del municipio Boyeros, se encontraron “encuestas epidemiológicas incompletas, ausencia de mapas de casos, pacientes negados a ingresar, ausencia de hipoclorito y productos vencidos”.
Las deficiencias detectadas provocaron “la aplicación de severas medidas disciplinarias y administrativas y sustitución de cuadros [dirigentes]”, aseguró el medio gubernamental.
El policlínico docente y comunitario René Bedia Morales, se ubica en la calle 7 entre 10 y 12, Santiago de las Vegas. Según el Directorio de Instituciones del Minsap, "tiene como misión desarrollar los servicios en la comunidad, brindar atención integral a la familia, la comunidad, mediante un equipo multidisciplinario de especialistas".
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El número de muertes diarias por coronavirus se ha disparado en Cuba en los dos últimos días. Este 3 de septiembre, fallecieron dos personas; la víspera, otras tres. De este modo la cifra de decesos se eleva hasta 100 desde que se reportara el primer caso de la COVID-19 en la isla hace más de cinco meses.
Uno de los fallecidos es un paciente de 85 años de edad que residía en el municipio San Cristóbal, provincia Artemisa, con varios antecedentes de comorbilidad; murió de un paro cardíaco. La otra persona es una señora de 87 años, del municipio Cotorro, provincia La Habana, que llegó el primero de septiembre al hospital y empeoró bruscamente; murió de un paro respiratorio.
Al cierre del día de ayer se diagnosticaron 88 casos nuevos, para un total de 41214. La Habana es la provincia con mayor número de enfermos, con 69 del total de diagnósticos reportados. Por esta razón, el primero de septiembre la ciudad entró en estado de sitio para reducir drásticamente la propagación del virus, una decisión que tomó el régimen la semana pasada.
Hay más de 1346 personas ingresadas en los hospitales bajo vigilancia y, de ellas, 638 se mantienen ingresadas con la enfermedad. Se reportan cuatro pacientes en estado crítico y 17 en estado grave.
En el último mes, las provincias más afectadas con esta segunda ola del virus han sido La Habana, Artemisa, Villa Clara y Pinar del Río, por lo que en determinados barrios y zonas existen cuarentenas obligatorias.
De los 88 casos diagnosticados, 87 son cubanos y uno es extranjero. De ellos, 77 fueron contacto de casos confirmados previamente y en 11 se investiga la fuente de infección, según el último reporte del Ministerio de Salud Pública. Unos 63 del total de casos nuevos eran asintomáticos.
El pasado 11 de marzo se confirmaron los primeros casos positivos de infección de coronavirus en Cuba, con tres turistas de visita en el país, según datos del Minsap.
