El usuario en Facebook Ezequiel Ignacio Álvarez Sosa denunció a través de esta red social que la activista cubana María Cristina Garrido Rodríguez y su esposo el opositor Michael Valladares, “fueron detenidos por la policía de la dictadura militar-totalitaria-castrista el día de hoy (10 de enero), mientras transmitían una directa”.
“Usted puede ser testigo presencial de los abusos y las arbitrariedades del terrorismo de estado que impera en la patria de Martí y Maceo”, señaló Álvarez Sosa.
Por su parte, Arnold Fernández, publicó: SOS. Solidaridad con nuestros hermanos de lucha Michael Valladares y María Cristina Garrido Rodríguez. Compartir para que la dictadura sepa que no están solos”.
María Cristina Garrido ya fue liberada, según confirmó a través de una directa por su perfil en Facebook. Según detalló la activista, mientras realizaba otra transmisión esta mañana a las afueras de la estación policial, mientras su esposo era interrogado, un agente se le acercó y le “arrebató” su teléfono celular.
“Se creen que porque tienen uniforme pueden hacer y deshacer”, dijo Garrido.
La joven denunció que fue acusada de “desacato y desobediencia civil”. “Tengo una medida cautelar y no la firmé porque no estoy de acuerdo con esas acusaciones. Ellos fabrican todos esos delitos para poder sancionar y pasarle por encima a la Constitución. Son un esbirros”, afirmó.
Hasta el momento su esposo Ezequiel Ignacio Álvarez se encuentra arrestado arbitrariamente.
Agentes del régimen habían citado a Michael Valladares para la policía de Quivicán, provincia de Mayabeque, luego de que él y su pareja criticaran en las redes sociales el alto precio de los alimentos y el pésimo estado de éstos.
Valladares dijo a Radio Televisión Martí que el pasado viernes cuando fue a recoger el almuerzo del abuelo de su pareja la administradora del establecimiento junto a dos inspectores lo reprendió.
"Me dijo que me fuera del lugar lo antes posible porque le habíamos traído problemas al poner en las redes las fotos de las raciones de comida que venden allí a los ancianos", explicó.
Dijo que un rato después de retirarse del lugar fue citado para que se presentara en la estación policial de Quivicán.
"Me negué a ir porque no me entregaron una cita oficial y este sábado volvieron con ella para que el domingo esté a las 11.00 am en la policía, precisó.
A criterio de Valladares la citación está relacionada con todas las publicaciones que tanto él como su pareja han estado haciendo en sus perfiles de Facebook.
Recientemente en un post Garriga criticó que en plena pandemia cuando el régimen debe favorecer al pueblo, hace todo lo contrario al poner precios a la alimentación que no se corresponden con la cantidad y calidad de éstos.
"Arroz y boniato para los ancianos. No vale los 13 pesos. Esto vale centavos. Exigimos que cambien el precio de esta comida. Los viejos no merecen esta alimentación igualada a la de una prisión y por un precio tan abusivo", escribió la activista en su perfil de Facebook.
