El cubano Keyler Rafael Rodríguez Alvelo, preso en Cuba desde 2017 y condenado a siete años de cárcel por el delito de “atentado” durante una visita a la isla desde Estados Unidos, donde residía legalmente, denunció al medio independiente CubaNet que las autoridades carcelarias del régimen le niegan los beneficios legales que le corresponden por haber cumplido más de la mitad de su condena.
En conversación telefónica con el referido medio, Rodríguez Alvelo aseguró que lleva más de tres años sin ver a su familia, la cual reside en la capital y no puede acudir a la provincia de Granma, donde él se encuentra recluido en el campamento penitenciario El Chungo, en la cabecera provincial, Bayamo, y donde ha cumplido ya cinco años de su sentencia.
“No me quieren dar ningún tipo de beneficio; ni los que me pertenecen como a todos los reclusos que están aquí. No me dan permiso de salida, no me dan traslado (para La Habana). Llevo tres años sin ver a mi hija porque no puede venir a esta provincia para verme y así van cinco años sufriendo”, expuso el recluso desde la prisión.
De acuerdo con CubaNet, Rodríguez Alvelo fue arrestado por la policía cubana de forma violenta luego de un altercado. El joven había viajado a La Habana en un vuelo procedente de Estados Unidos para visitar y pasar unos días con su familia.
Para desplazarse durante su estadía en Cuba rentó un auto de turismo y viajó al oriente del país, donde unos policías lo detuvieron en el río El Chapuzón, en Granma, y “como estaban embriagados” se dirigieron a él “en mala forma”, lo que condujo a un altercado y a su posterior detención, según narró en su conversación con el citado medio.
“Por decirle nada más que lo más correcto sería haber dicho buenas tardes, parece que esas palabras los ofendieron mucho y, como estaban embriagados, por esa sencillez, me acusaron por el delito de atentado. ¿Cómo es posible que si yo no golpeé a nadie me acusen a mí de atentado, si fueron ellos los que me golpearon?”, cuestionó Alvelo.
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La sentencia de Rodríguez Alvelo narra los sucesos de manera diferente.
CubaNet tuvo acceso al documento, que refiere que el acusado se acercó al área de baño del sitio recreativo en el que estaba con el auto, pese a que las señalizaciones viales daban cuenta de que había una prohibición de hacerlo.
Ante la infracción, señala el reporte, los elementos policiales actuaron y le hicieron señas a Rodríguez Alvelo para que se detuviera, pero éste habría desobedecido la indicación y aumentado la velocidad para dejar atrás a los oficiales y llegar a los márgenes del río, donde se produjeron el altercado y la detención.
La sentencia del Tribunal Provincial de Granma afirma que el acusado ofendió a los agentes, diciéndoles “que ellos estaban pasando hambre”, “que eran unos sin…”, “unos hijos de p…” y “unos come p…”.
De igual forma, el reporte asegura que otros oficiales tuvieron que acudir al lugar para poner fin al forcejeo que se produjo y para detener al acusado y el grupo de personas que lo acompañaban, dos de los cuales agredieron a los elementos policiales.
