Medios de propagada castrista celebran que “Cuba es el segundo país con el índice más bajo de Pobreza Multidimensional entre 105 evaluados”, según confirmó este 9 de abril el propio Ministerio de Economía y Planificación del régimen.
El diario oficialista Granma, publicó que “esa posición ratifica el compromiso y la voluntad de las autoridades y gobierno en el cumplimiento del primero de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible aprobados por Naciones Unidas de poner fin a la pobreza para 2030”.
El Índice de Pobreza Multidimensional diagnosticado por la ONU, evalúa las carencias en los hogares, el nivel de vida de las familias y el acceso a servicios en los ámbitos de salud y educación.
“Comentar sobre un tema técnicamente complicado como es el Índice de Pobreza Multidimensional (IPM) entraña riesgos si se hace en Twitter. Existe polémica entre economistas, aunque hay un amplio consenso: la pobreza tiene numerosas dimensiones”, refirió en la citada red social, el prestigioso economista cubano Pedro Monreal.
El académico, detalló en un hilo en Twitter, que “la polémica que se observa en las redes sociales respecto al lugar que ocupa Cuba en el ranking también se produce en el caso de otros países. La diferencia es que en otros países se dispone de información adicional, como la 'línea de pobreza', la cual no es pública en Cuba”.
“En condiciones como las de Cuba, con programas sociales que contribuyen a evitar, o cuando menos a aminorar carencias en varias dimensiones de la pobreza, crece el interés por la dimensión monetaria de la pobreza, la cual es una dimensión muy visible en el país. Una presentación completa de la pobreza en Cuba debería incluir, como se hace en muchas partes, otros indicadores además del Índice de Pobreza Multidimensional (IPM) porque facilitaría identificar causalidades y entender la pobreza en su contexto específico”, acotó el Doctor en Ciencias Económicas por la Universidad de La Habana.
“El Índice de Pobreza Multidimensional (IPM) surge como alternativa al tradicional Índice de Línea de Pobreza (ILP) que sigue siendo el más ampliamente utilizado. El IPM mejora la medición de pobreza porque permite captar la dimensión no monetaria de la deprivación”, precisó Monreal.
“El desacuerdo básico con la medición de la pobreza no es el reconocimiento de su multidimensionalidad, sino la manera más adecuada de captarla. ¿Es más apropiado un índice 'compuesto' como el IPM, o es superior un 'tablero' (dashboard) de varios indicadores?”, cuestionó “En general se reconoce el aporte que ha hecho el Índice de Pobreza Multidimensional (IPM), pero su utilización ha estado acompañada de una polémica que incluye, entre otras críticas, que el IPM no refleja varias dimensiones importantes de la pobreza”, añadió.
Según el reconocido economista, también “se critica al Índice de Pobreza Multidimensional (IPM) que algunas de las dimensiones que incluye están siendo medidas de manera insuficiente. Por ejemplo, la categoría “calidad de la vida” no incluye el desempoderamiento ni la inseguridad”.
“La posibilidad que ofrece el Índice de Pobreza Multidimensional (IPM) de hacer un 'ranking' de pobreza global mediante un índice compuesto representa simultáneamente una desventaja porque estimula la consideración de que el IPM no refleja el contexto específico”, concluyó Monreal.
En medio de la profunda escasez, desabastecimiento, deterioro del fondo habitacional, el resquebrajamiento de las entidades de salud y educación; así como la falta de insumos médicos, fármacos y material educativo; la promoción de Cuba como “segundo país con el índice más bajo de Pobreza Multidimensional”, no es más que otra noticia sobre la isla que se aleja totalmente de la realidad que viven los cubanos.