Cubanos de a pie han comenzado a denunciar en las redes sociales lugares en La Habana donde se observan edificios, casas o estructuras frágiles que pudieran causar muertes como las de las tres niñas, fallecidas el lunes 27 tras el derrumbe de un balcón en el barrio Jesús María, en La Habana Vieja.
Otras iniciativas llaman a la ciudadanía a reportar esos lugares para realizar una especie de inventario ciudadano sobre los sitios que representan un peligro para las personas.
Gastón Sariol escribió el martes 28 en su cuenta de Facebook: “No es el momento de analizar las causas, ni con una varita mágica se podrán resolver, (pero) se pueden tomar medidas para evitar acontecimientos terribles" como los sucedidos el 27 de enero.
Sariol publicó una foto de un lugar que ubicó como peligroso, localizado “en la parada del hospital Amejeiras, San Lázaro, casi esquina a Oquendo”.
La imagen, en efecto, muestra a un edificio grisáceo, a punto de colapsar. Es una estructura de dos pisos, carcomido por el tiempo, con un balcón en la segunda planta, y en la acera, abajo, se observa a un grupo de personas, entre ellas dos niñas en uniforme escolar.
Alexis Dalmau comentó sobre la fotografía: “Horrible eso, ¿no se podrá trasladar la parada a otro lugar más seguro?”.
Sariol añadió en su post: “Quiero hacer constar que no soy ninguna de esas personas que para dañar la imagen del país mandan imágenes deplorables, aunque ciertas de algunas zonas de nuestra ciudad, soy un cubano que amo a mi patria, tampoco ciego y con profundo dolor veo como año tras año se han ido depauperando zonas importantes de nuestra querida capital”.
Exhortó a tomar medidas para que en lo posible no se repitan hechos semejantes, y reiteró sus condolencias a los familiares de las niñas “que nos dejaron en el día del natalicio de nuestro apóstol”.
María Karla Fuentes y Lisnavy Valdés Rodríguez, ambas de 12 años, y Rocío García Nápoles, de 11 años, murieron el lunes tras caerles un balcón, en La Habana Vieja. El hecho desencadenó una andanada de críticas contra el régimen, por la indiferencia que ha mostrado en atender la infraestructura de barrios pobres como Jesús María, en La Habana Vieja.
Mientras tanto, una cuenta en Twitter identificada como Inventario, llama a las personas a localizar sitios peligrosos.
“Invitamos a todos a ayudar a localizar construcciones en peligro de derrumbe”, y proporciona una etiqueta para mantenerse informados en las redes.
“Envíanos todos los datos que puedas”, señaló.
Los datos requeridos son la dirección del lugar (nombre de la calle, número del edificio o casa, etc.), municipio, provincia y si es posible foto (fachada, alrededores, interior).
