Roberto de Jesús Quiñones Haces, abogado y periodista independiente condenado a un año de prisión por delitos de “desobediencia y desacato”, fue conducido esta tarde a prisión en Guantánamo, confirma el sitio de noticias Cubanet, donde habitualmente escribe el reportero independiente.
Quiñones no se presentó voluntariamente el 5 de septiembre en la prisión provincial de Guantánamo, como se le había ordenado en la sentencia en su contra, y esta tarde, finalmente, las fuerzas policiales del régimen se lo llevaron detenido.
Quiñones debía empezar a cumplir su condena este 12 de septiembre, según dictaminó el Tribunal Municipal. Sin embargo, el sábado 31 de agosto por la noche, una funcionaria del Comité de Defensa de la Revolución, le llevó una citación para que acudiera nuevamente al Tribunal, según contó el propio reportero.
“(…) aproximadamente a las 10:15 am me notificaron un nuevo documento donde se afirma que debo presentarme en la prisión provincial este 5 de septiembre a las 8:00 am”, escribió el periodista sancionado, y dijo desconocer si el adelanto en la fecha de su ingreso a prisión responde a “una muestra más de la desorganización y falta de capacidad técnica” o si en cambio “se trata de otro método de hostigamiento psicológico”.
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El reportero aseguró entonces que no se presentaría voluntariamente en la cárcel de Guantánamo.
“(…) he pensado que entonces lo mejor es esperar a que vengan a detenerme en mi propia casa, ojalá que con la misma aparatosidad y despliegue de fuerzas que de forma tan cobarde han realizado otras veces cuando han venido a allanar mi vivienda para robarme mis bienes”— comentó en referencia a las anteriores detenciones y allanamientos que ha sufrido por ejercer el periodismo independiente.
“No tengo por qué gastar mi dinero en trasladarme a la prisión para cumplir una sanción injusta e ilegal”, agregó.
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El 6 de septiembre último, en un video publicado por Cubanet, Quiñones había expresado: “Ya estoy listo. Lo que me queda es pelarme en una barbería que queda cerca, porque a partir de ahora en cualquier momento pueden venir a recogerme”.
En su texto antes de entrar a prisión, el reportero, quien ha recibido una amplia solidaridad de instituciones internacionales declaró: “Si a los oficiales de la Seguridad del Estado y del Ministerio del Interior se les ocurre usar a los delincuentes que les sirven de chivatos en el interior de la prisión para atacarme, ya están avisados. Lo que ocurra será de su entera responsabilidad. Y voy a la prisión con mi conciencia muy tranquila y con una dignidad que ya quisieran tener siquiera un día quienes me han colocado en esta situación”.
La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión (RELE) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha condenado la sentencia contra el periodista. La institución aseguró además que “En lo que va del 2019, esta oficina ha monitoreado el incremento de actos de intimidación y hostigamiento hacia activistas, defensores de derechos humanos y periodistas independientes con el objetivo de que, mediante el castigo o la intimidación, se abstengan de ejercer su derecho a opinar expresarse, asociarse y reunirse pacíficamente”.
A principios de mes el reportero fue incluido en la lista de One Free Press Coalition, como uno de los 10 casos más urgentes de injusticias contra periodistas en el mundo.
ADN CUBA ha manifestado en diversas ocasiones y reitera ahora su solidaridad con el reportero y su compromiso con el derecho de los cubanos a las libertades de prensa y expresión.
