Destruida finca El Infierno de los Urquiola: "Sin techo pero vivos"

La finca "El Infierno", del científico y activista cubano Ariel Ruiz Urquiola, ubicada en Viñales, en la provincia de Pinar del Río,  sufrió graves daños este jueves tras el paso del huracán Ian.

Fue su madre,  Isabel Urquiola, quien está a cargo de la propiedad, la que le suministró toda la información.

Según informó en su perfil de Facebook el científico cubano exiliado, el evento meteorológico se llevó la mitad del techo de la vivienda de la finca.

"Esto ha sido terrible: la cuadra y la casita. Gracias a Dios estamos vivos y los animales grandes también, los cultivos ni contarte", le explicó su progenitora.

También le contó que el huracán derrumbó viviendas de varios vecinos. "Se llevó la casita de Yosbi, la de Felo y cualquier cantidad abajo. ¡El dolor lo supera sólo el estar vivos!", aseguró.

El martes Ruiz Urquiola escribió: "Mi madre decidió correr la misma suerte q nuestros animales y ahí están juntos: Isabel, vacas, yeguas, perros, gatos, gansos ¡Queremos VOLVER A CASA!".

Por su parte, la profesora y activista Omara Ruiz Urquiola, hermana del científico, agradeció en redes sociales a quienes se han preocupado por la situación de su madre.

"Mi madre y los animales están bien. Sin techo pero vivos. Gracias a quienes se preocuparon", escribió en su perfil de Facebook este miércoles.

Omara Ruiz declaró a ADN Cuba que "la mayor parte del techo de la vivienda quedó destruido y las tejas no se pueden reutilizar. La cocina sí mantuvo el techo que ahí fue donde se refugió mi mamá. Pero todos los cultivos fueron arrasados, árboles de mango y de aguacate partidos a la mitad. Solo dos matas de guanábana quedaron en pie por lo que ella pudo contabilizar hasta ahora".

También denunció que su madre no tiene conexión de internet actualmente, aunque sus vecinos sí tienen, por lo que considera que es una maniobra de la Seguridad del Estado para evitar que se comunique.

La familia no solo ha sufrido los embates de eventos meteorológicos tratando de sacar adelante su finca sostenible, sino que lleva soportando desde hace años la represión que ejerce contra ellos la Seguridad del Estado cubana.

El científico Ruiz Urquiola fue expulsado en 2016 del Centro de Investigaciones Marinas de la Universidad de la Habana por exponer las malas prácticas ambientales del régimen. Mas tarde, en 2018, la dictadura lo condenó a un año de prisión, supuestamente por desacato. Ruiz Urquiola respondió a su juicio con una huelga de hambre y sed de 16 días.

A finales de 2019 el opositor acusó al régimen de haberle inoculado el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) en el hospital "Abel Santamaría", de la provincia de Pinar del Río, al que fue trasladado tras la huelga.

Desde 2020 reside en Suiza, donde no ha parado de denunciar las violaciones de derechos humanos cometidas por el régimen en su contra y los atropellos a miles de cubanos.

Más recientemente su hermana, la profesora Omara Ruiz Urquiola, fue desterrada de la isla. Ella había viajado a Estados Unidos para atenderse el cáncer del que padece y, cuando intentó regresar al país en julio de 2022, las autoridades no se lo permitieron.

Con anterioridad, en 2019, la académica había sido expulsada del Instituto Superior de Diseño (ISDI), donde laboraba como docente e investigadora desde hacía más de 20 años.