Fue noticia el viernes 20 de marzo, que ante la crisis generada por el COVID-19 en el país, el Banco Central de Cuba resolvió cambiar las condiciones de los créditos.
La entidad bancaria decidió interrumpir las condiciones del crédito y no cobrar el devengo de los intereses como una medida para atenuar el impacto del virus de Wuhan en la economía del país, según anunció Francisco Mayobre Lence, vicepresidente primero de la institución.
En una intervención realizada en el programa televisivo Mesa Redonda, el directivo explicó que el nuevo coronavirus y las medidas que urge tomar hacen que haya una afectación directa en los ingresos de varios sectores de la economía cubana que en estos momentos están siendo objeto de créditos bancarios.
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Debido a la situación mundial provocada por el COVID-19 y a las nuevas medidas adoptadas por el régimen de los Castros para tratar de controlar la propagación del virus en la isla, se entiende la depresión que va a experimentar el sector del turismo y el trabajo por cuenta propia.
Al respecto Francisco Mayobre recordó que la población puede estar sujeta a créditos, o ser objeto de tratamientos salariales que también depriman sus ingresos en ese nuevo contexto.
El escenario por el que atraviesa el país a partir de la presencia en este del COVID-19, hace que se adopten medidas crediticias para mantener la vitalidad de esos sectores, pues "si los ingresos no son capaces de suplir las obligaciones, habrá que postergar ese cobro y el devengo de los intereses durante el tiempo que se mantenga esa situación", enfatizó Mayobre.
De manera resumida, lo que se busca es "que el crédito no vaya a formar un agravante en ningún sector de la economía y adaptarlos, postergarlos, para no afectar", agregó. Así Mayobre dijo que cuando la situación vuelva a la normalidad, se retomará la deuda y esta será reprogramada.
El directivo aclaró además, que el banco emitirá un documento con todos los detalles donde se precisará cómo será el procedimiento, siempre analizando los casos puntualmente.
Las cifras de contagiados con el virus Sars-CoV-2 en la isla se elevaron el día de ayer a 21, luego de que se reportaran cinco nuevos casos positivos a la COVID-19, lo cual motivó que el régimen de La Habana adoptará nuevas medidas, las cuales engloban varios sectores de la sociedad.
