Los medios oficiales vertieron en Cuba un aluvión de mensajes sobre el coronavirus, pero a ciencia cierta no se sabe si el país está preparado para la llegada de la pandemia, que alarma al mundo entero.
ADN Cuba salió a las calles para conocer la opinión de los ciudadanos sobre el tema y, a decir verdad, parecen satisfechos con la información que brinda la prensa oficial allá. Hablan de los síntomas de la enfermedad con conocimiento y saben criticar lo dudoso, como aquella teoría disparatada de que es un invento de Estados Unidos para atacar a China.
Cabe destacar que este sábado los jerarcas del régimen celebraron la tercera reunión territorial con autoridades de la administración en Holguín, Camagüey, Las Tunas, Granma, Santiago de Cuba y Guantánamo para dar seguimiento al "Plan del país" que establece las pautas de enfrentamiento del nuevo coronavirus.
La víspera, medios locales revelaron que el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK) tiene listas 160 camas para enfrentar la posible llegada del coronavirus y que otras 2400 están diseminadas en todo el país por si aparece el virus.
Según el ministro de Salud, José Ángel Portal, los laboratorios están equipados y tiene los medios necesarios para el diagnóstico de la enfermedad, que han sido facilitados por el Ministerio de Salud y por la Organización Panamericana de la Salud.
Sin embargo, la propaganda oficial no menciona los graves problemas en el sistema primario de salud. No hay médicos de familia suficientes y los que hay, no dan abasto para tantos pobladores, pues tienen que cubrir las áreas de los otros consultorios.
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Escasean los medicamentos en las farmacias, como bien saben los cubanos. La crisis de este sector vital para el sistema de salud se arrastra desde hace años. Un instrumento básico como el termómetro, es difícil de conseguir.
Hoy, el científico cubano Osvaldo Casanella declaró a Radio Televisión Martí que es necesario estar bien alimentado para enfrentar el coronavirus, pero ¿dónde está la comida? Es bien sabido que muchos cubanos no pueden comer tres veces al día, ni ingerir una dieta balanceada.
Los doctores chinos que descubrieron la enfermedad confirman el aserto del científico. La mayor parte de los enfermos graves son personas de la tercera edad o con problemas de salud subyacentes. Ahora bien, no sólo hace falta una buena alimentación para hacer frente a la pandemia de Wuhan.
El coronavirus, una de las mayores crisis sanitarias de los últimos años cuyas consecuencias son todavía impredecibles, se ha extendido por más de 95 países y afecta a unas 110 mil personas, de las que más de 3800 han perdido la vida.
