Con solo una foto que lo muestra jugando en su barrio en La Habana, junto al breve texto "cómo empezó; cómo va", el futbolista cubano Maikel Chang conmovió a sus fans en redes sociales este fin de semana, al recordarles de dónde viene y cuánto ha crecido profesionalmente.
El nacido en la capital de Cuba el 18 de abril de 1991, ahora juega en el equipo Real Salt Lake de la Major League Soccer de Estados Unidos, como se puede apreciar en el lado derecho de la fotografía compartida en Facebook.
Más de 470 reacciones ha tenido este post, que también le ha valido al futbolista estos comentarios: "Maikel hermano eres ese ejemplo al cual podemos mirar a nuestros hijos y decirles ahí tienes un modelo a seguir de joven. Gracias por tanta humildad, esfuerzo, coraje, entrega. Amor por los tuyos o lo que es lo mismo este pueblo de Cuba que te sigue y está contigo en cada presentación. Saludos y que un día puedas representar de nuevo a esta bandera que que te vio nacer y que tanto amas lo sé", escribió el usuario Yuriel Suarez.
Como "desertor", según lo califican los jerarcas del deporte nacional, este volante ofensivo cubano, de raíces chinas visibles en su apellido Chang, tiene prohibido volver a su tierra natal.
Las autoridades le negaron la entrada a la isla al futbolista, informó él en su cuenta de Facebook a principios de este año de pandemia.
"Después quieren que cuando gane un torneo saque la bandera de Cuba, como la voy a sacar si me acaban de decir en el aeropuerto que no puedo entrar a Cuba", señaló.
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En 2018, un año de Mundial, frente a los recuerdos y el frío de Utah, Maikel Chang repasó su historia para AS USA. Hacía muy poco de su debut con Real Monarchs (Monarcas) equipo de segunda división (USL) del Real Salt Lake, organización de la MLS.
Contó entonces que "todo, absolutamente todo, lo borra el balón, y la alegría de estar paso a paso consiguiendo los objetivos, aunque aún queden más".
Precisó además que se decidió por el fútbol porque era su pasión, aun cuando jugaba al béisbol, "como cubano que se respete".
Luego de unos meses viviendo en Florida y luego en Carolina del Sur, Maikel llegó a Salt Lake City, "lo más frío" que ha sentido como caribeño.
El comienzo de su esta aventura al escapar del equipo cubano para labrarse su propio camino fue en 2012. Era un 10 de octubre, como hoy, cuando el equipo llegó a Toronto y Maikel lo tenía "todo soñado". Llegaron al hotel, dejaron sus cosas en los cuartos y bajaron a comer. Al regresar a las habitaciones, él y dos compañeros más tomaron la decisión y se bajaron por las escaleras de incendios para escapar, relata AS USA.
