La crisis económica provocada por el nuevo coronavirus está cayendo sobre gran parte de la población, pero quienes más sufren son las personas vulnerables como los migrantes.
Entre enero de 2019 y marzo de 2020 han llegado a Costa Rica más de 3200 cubanos para pedir refugio, según datos de Migración y Extranjería de ese país y precisamente ahora decenas de ellos se enfrentan a la pobreza.
En una investigación previa publicada por ADN, las personas provenientes de Cuba constituían el tercer grupo que más refugio pedía en ese país centroamericano; pues bien, en este nuevo corte pasaron al segundo lugar, desplazando incluso a los venezolanos, que también atraviesan una grave crisis.
Yankiel Marzo, cubano de Mayabeque, es uno de los afectados por el desempleo y el hambre. Llegó hace 9 meses a Costa Rica y desde enero no tiene trabajo.
Este viernes, un grupo de cinco cubanos que pidieron refugio en Costa Rica, entre ellos Yankiel, se apersonaron en las oficinas de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), en busca de ayuda.
Llegaron a las 8 de la mañana a las oficinas y fue dos horas después que dejaron pasar solamente a Yankiel.
"Les expliqué que nosotros estábamos comiendo hasta una sola vez al día, que nos iban a sacar del alquiler. Ellos nos dijeron que llamáramos a los números de ACNUR que dieron, pero les dije que estoy cansado de llamar y no responden. Entonces no me puedo ir para Cuba pero tendría que dormir debajo de un puente aquí".
"Nos manifestamos pues somos muchos cubanos aquí necesitados. Muchos sin comida, sin dinero, sin pagar alquiler y el Estado no ha hablado nada ni la ACNUR sobre ayuda a refugiados como nosotros. Por lo menos en otros países están libres de impuestos, con bonos de comida y aquí nada. Hay personas con niños y todo que no tenemos un peso, ni comida", explicó Marzo a ADN Cuba.
El joven contó que lleva meses buscando trabajo y entregando currículums pero no lo llaman.
"La problemática principal debido al virus es el desempleo, la hambruna, porque imagino que deben haber algunos pasando bastantes necesidades, incluso conozco personas que están en la calle, sin dinero
ni comida y los han sacado de los alquileres donde viven", aseguró.
Julian Duhtil Coello es otro cubano de Santiago de Cuba que desde que llegó a Costa Rica en septiembre del 2019 no encuentra trabajo y se presentó en ACNUR esta mañana.
"Estoy en una condición en este momento muy mala. Mi situación económica es pésima ya que no tengo plata para comer en este momento y se me vence el alquiler el día 6 y no tengo cómo pagarlo, entonces fui ahí para ver si me podían ayudar económicamente. Me he tenido que sustentar a base de trabajitos de una semana, informales y eso no me da para vivir aquí por lo caro que es", dijo.
La enfermera Yudien Cundu Sanabria, de Holguín, lleva 8 meses en Costa Rica y también se vio obligada a pedir ayuda debido a la precariedad por la que atraviesa.
"No tengo con qué pagar la renta ni comprar comida, y sin tener trabajo. Ahora mismo me acaban de llamar para decirme que van a valorar el caso. A nadie de los que fuimos hoy le dieron seguridad de nada, solo que esperemos y los dueños de las rentas y el hambre no esperan", sentenció Cundu Sanabria.
Asimismo la presencia de la COVID-19 en Costa Rica sigue en aumento aunque estable, con 416 casos confirmados hasta este jueves por el Ministerio de Salud y dos fallecidos.
Desde hace dos semanas, el gobierno de la República decretó el estado de Emergencia Nacional, debido a la amenaza de esta enfermedad.
Se suspendieron las lecciones en los centros educativos públicos y privados y hasta el 4 de abril. Muchos negocios también han tenido que cerrar sus puertas ante los bajos ingresos.
Además, solo pueden entrar al país centroamericanos las personas costarricenses y los residentes, medida que se extenderá hasta el 12 de abril, y estos deberán permanecer 14 días en cuarentena. Además, los extranjeros que se encuentran en trámites migratorios, si abandonan territorio nacional, perderán su condición.
Por otra parte el martes anterior, el primer ministro de Cuba, Manuel Marrero anunció la suspensión total de los vuelos a la isla, lo que significa que ni los cubanos ni los extranjeros residentes podrán entrar al país.
Mientras tanto, las autoridades sanitarias del régimen cubano confirman hasta la fecha 269 casos de coronavirus en la isla, con seis fallecidos.