El periodista independiente Henry Constantin Ferreiro pidió al presidente designado de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez que controle los precios abusivos del consorcio empresarial GAESA.
Luego del anuncio de la “Tarea Ordenamiento” y el aumento desproporcionado de los precios en Cuba el régimen cubano ha perseguido a los cuentapropistas para que bajen los precios. El propio gobierno dio paso a la inflación al incrementar los costos de servicios vitales como la electricidad.
El director de La Hora de Cuba se dirigió al mandatario con un post de Facebook y expuso las empresas que pertenecen a GAESA y que dilapidan el bolsillo de los cubanos:
“Díaz-Canel y una tropa de funcionarios estuvieron hablando hoy, según el Noticiero, de "impulsar el enfrentamiento a personas inescrupulosas que lucran con la reventa ilegal de productos a precios exorbitantes y que tanto rechazo generan en la población". Dice el NTV que adoptaron medidas encaminadas a revitalizar ese combate en la Habana, y así harán luego por toda Cuba.
Díaz, no tienes que ir muy lejos, chico. Ahí cerca tienes al general de brigada y exyerno de Raúl Castro, Luis Alberto Rodríguez López-Callejas. Luis Alberto es el presidente de GAESA. Y es de GAESA la explotadora y subdesarrollada ETECSA, con sus paquetes de Internet por datos de 125 a 1125 pesos, para tener como máximo 14 gigas de 4g a un precio casi igual a la pensión mínima en Cuba. Son de GAESA las abusivas tiendas en MLC, que a punto de no tener nada que ofrecer a los que aguantan las colas, les queda vergüenza para vender una lata con dos microsardinas por casi 40 pesos, tres chorizos por más de 120, un paquete de hígado o de molleja de pollo por casi 40 pesos, o siete libras de queso por casi 700 pesos (eso si el cubano logra cambiar el USD a 1 por 25 pesos, lo cual es casi imposible).
Es de GAESA la estafadora CIMEX, que, además de vendernos la comida en las tiendas de MLC, también vende los autos usados más caros del mundo, con precios que ningún obrero, ingeniero, maestro ni médico cubano podrá comprarse jamás ni con su salario de 5 años completos en la isla. Son de GAESA los hoteles que no aceptan a nadie por menos de 800 pesos la noche (la mitad de la pensión que recibe al mes un maestro de preuniversitario jubilado), y las gasolineras que cobran 25 pesos por un litro de gasolina que Maduro les da a precio subsidiado, el mismo litro que en Miami, que no tiene amigos chavistas, solo vale poco más de 50 centavos de dólar”.
Sobre el acoso a los trabajadores privados Constantin Ferreiro concluyó:
“Miguel, compadre, no es al carretillero de viandas, ni al del puesto de la carne de cerdo, ni al campesino de las cebollas y ajos, ni a la señora que tiene un saco de arroz en su casa, ni al que trae queso de contrabando a quien buscas: es al de GAESA. Los bolsillos de todos los cubanos humildes van a respirar cuando ese señor no se siente más en una oficina climatizada, sino en un banquillo de tribunal. Ve por él, Díaz-Canel”.
Estados Unidos sanciona a GAESA
La anterior administración de Donald Trump impuso severas sanciones a GAESA con el fin de asfixiar económicamente al régimen castrista. Los expertos aseguran que este consorcio aporta la mayor parte de los ingresos de la dictadura.
El pasado 30 de septiembre el Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó al general Luis Alberto Rodríguez López-Callejas, cercano a la familia Castro y jefe del conglomerado empresarial adscrito a las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) del régimen cubano.
El general estuvo casado con una hija de Raúl Castro y mantienen excelentes relaciones con la familia reinante y el mundo empresarial acreditado en Cuba.
En diciembre último Estados Unidos agregó tres empresas cubanas, controladas por militares, a la lista de entidades que tienen prohibido establecer cualquier actividad comercial en su territorio o con empresas estadounidenses.
Se trata del grupo empresarial del Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (GAESA), la financiera de Cimex (FINCIMEX) y la empresa cafetera Kave Coffee S.A., acusadas de utilizar una filial panameña para evadir las sanciones.
Por último, el 1 de enero del 2021, el Departamento de Estado de EE.UU. anunció “la incorporación del Banco Financiero Internacional S.A. (BFI) a la Lista Restringida de Cuba”, medida que es efectiva a partir de su publicación.
Según lo anunciado en la página digital del Departamento de Estado en la mañana del viernes, el Banco Financiero Internacional “es un banco comercial cubano controlado por el ejército que se beneficia directamente de las transacciones financieras a expensas del pueblo cubano”.
La nota agrega que las fuerzas armadas en Cuba se benefician con el uso del BFI “en materia de divisas para dar a los militares y a las empresas estatales acceso preferencial, asegurar tipos de cambio ventajosos y financiar proyectos controlados por el gobierno que enriquecen al régimen”.