La petrolera de Venezuela PDVSA mantuvo sus exportaciones de petróleo en alrededor de 1 millón de barriles por día en marzo, pese a las sanciones impuestas por Estados Unidos y cortes de energía que paralizaron su principal terminal de exportación, según documentos de la compañía y datos de Refinitiv Eikon.
La nación miembro de la OPEP estabilizó las exportaciones en marzo después de que los envíos cayeron más de 40 por ciento en febrero respecto al promedio de los tres meses previos, inmediatamente después de que Washington anunció sanciones a las ventas de crudo de la petrolera estatal para presionar al gobierno de Nicolás Maduro.
Estados Unidos y decenas de países han reconocido al líder opositor y jefe del Parlamento, Juan Guaidó, como el presidente legítimo después de que Maduro ganó la reelección en mayo del 2018 en comicios vistos como fraudulentos.
Las exportaciones de marzo de 980.355 barriles por día (bpd) de crudo y combustibles fueron levemente inferiores a los envíos de febrero de 990,215 bpd, según los datos de PDVSA y Refinitiv Eikon.
Las restricciones del gobierno del presidente Donald Trump a las exportaciones venezolanas se volverán más estrictas en mayo, cuando expire el período de gracia para cerrar compras hechas en dólares o por importadores que tengan filiales con sede en Estados Unidos.
Washington está considerando imponer sanciones secundarias a la compra de petróleo venezolano que podrían afectar a compañías de otros países que hagan negocios con PDVSA, dijo la semana pasada el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Bolton.
La mayoría de los envíos de petróleo venezolano en febrero y marzo se despacharon a Asia. Hasta la imposición de sanciones, Estados Unidos era el mayor comprador de crudo de Venezuela.
“Dado el nuevo conjunto de medidas que recayeron sobre PDVSA, nos sorprendió ver un repunte en las exportaciones en medio de los apagones en todo el país”, dijo Samir Madani, cofundador de TankerTrackers.com, un servicio que rastrea envíos y almacenamiento de petróleo.
Las exportaciones de PDVSA cayeron por debajo de 650.000 bpd durante los apagones, según las estimaciones de TankerTrackers.
Según los datos de Eikon, dos grandes cortes de energía en marzo provocaron que la terminal de Jose, la más grande para exportación de crudo del país, interrumpiera despachos por unos seis días en total.
Sin embargo, PDVSA pudo compensar sus ventas tras los apagones al cargar embarcaciones más grandes con destino a Asia. Los datos de envío muestran que la compañía planea hacer lo mismo en abril.
Los cargamentos enviados a India, China y Singapur, un centro de almacenamiento y reexportación, representaron el 74 por ciento de las exportaciones totales en marzo, en comparación con casi el 70 por ciento en febrero.
Las exportaciones a Europa representaron el 17 por ciento del total, frente al 22 por ciento del mes anterior.
PDVSA también continuó exportando petróleo a Cuba, aliada de Maduro. Según los datos, se enviaron al menos siete cargamentos pequeños desde sus puertos en marzo por un total de 65.520 bpd de crudo y combustibles.
El mes pasado, la Asamblea Nacional liderada por Guaidó ordenó que se detuvieran los embarques petroleros a Cuba. Pero PDVSA, controlada por la cúpula militar leal a Maduro, ha seguido exportando a la isla.
La empresa estatal no respondió a una solicitud de comentarios.
La producción petrolera de Venezuela alguna vez superó los 3 millones de bpd, pero años de mala administración, corrupción y falta de inversión han resultado en una caída continua. El bombeo apenas alcanza 1 millón de bpd en la actualidad.
La reducción en los ingresos petroleros ha llevado a la nación de 30 millones de habitantes, una vez próspera, a cinco años de recesión, también contribuyendo a una hiperinflación que erosiona cada día el salario de los ciudadanos, limitando su acceso a alimentos y medicinas. Al menos 3 millones de venezolanos han huido del país.
Las sanciones han dificultado que PDVSA reciba pagos por exportaciones, dijo una fuente de la industria, que declinó ser identificada por temor a represalias.
“El mayor problema no es cargar y despachar los tanqueros”, dijo la fuente. “Es conseguir el pago”, agregó.
India volvió a ser el principal destino de las exportaciones de Venezuela en marzo con un tercio del total de los cargamentos enviados a refinerías operadas por Reliance Industries y Nayara Energy.
Las importaciones de Estados Unidos de petróleo venezolano cayeron a cero desde mediados de marzo debido a las sanciones, de acuerdo con la Administración de Información de Energía.
El receptor individual más grande de barriles venezolanos el mes pasado fue China National Petroleum Corp (CNPC) y sus subsidiarias con unos 234.000 bpd, seguido por Rosneft de Rusia, que recibió 214.000 bpd, según los datos.
Nuevos clientes, incluidas las firmas comerciales Sahara Energy y MS International, también recibieron crudo venezolano.
Desde las sanciones, Rosneft ha aumentado su participación en los envíos de petróleo venezolano, que principalmente revende a refinadores. El ministro de Petróleo de Venezuela, Manuel Quevedo, viajó el mes pasado a Moscú para negociar mayores entregas de petróleo venezolano a empresas rusas.
La compañía rusa también ha aumentado el suministro de combustible a Venezuela, según los datos. Venezuela importó 184.500 bpd de productos refinados en marzo, de los cuales Rosneft suministró la mayoría, seguida por Reliance y la española Repsol.
Tras presiones de Estados Unidos, Reliance cambió su logística para vender combustible a Venezuela desde India y Europa para evitar las sanciones. Antes los enviaba desde su filial en Estados Unidos.
En marzo, Repsol intercambió gasolina y otros combustibles por crudo venezolano como parte de un acuerdo para colectar dividendos adeudados por PDVSA.