“Un país con más jineteros que licenciados”, por qué no hay estallido social en Cuba según el doctor Pupo

Para el doctor Alexander Pupo, en Cuba no hay estallido social no por "compromiso con la revolución", como dicen los acólitos del oficialismo, sino porque el régimen ha logrado hacer de una nación rebelde, "un país con más jineteros que licenciados"
Doctor Alexander Pupo
 

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El joven médico cubano Alexander Raúl Pupo Casas, forzado a renunciar a continuar su carrera en el hospital Ernesto Guevara de Las Tunas por las maniobras de la dirección del centro en su contra, como represión a su voluntad de hacer uso en redes sociales de su libertad de expresión, dio su respuesta personal a la interrogante de por qué no hay un estallido social en Cuba, pese a la permanente situación de crisis que atraviesan el país y sus ciudadanos.

La interpretación que hace de los hechos el galeno lo llevan a distar de lo defendido por el principal órgano de propaganda del régimen, el diario Granma, el pasado 2 de noviembre. Según éste, bajo la rúbrica del vocero oficialista Iroel Sánchez, en Cuba no ocurre un estallido social porque el pueblo está abrumadoramente junto al gobierno, defendiendo la Revolución, pese a la “campaña mediática” de los “enemigos” para incentivar una revuelta.

Sin embargo, para Pupo la causa de que no se haya producido un estallido “está muy lejos” de ser un “compromiso con la mal llamada Revolución”, como afirmó, intentando tergiversar la realidad según el doctor, “la prensa izquierdista y manipuladora”.

“El comunismo es la doctrina que utiliza un Estado para volver miserables a los hombres con el consentimiento de los mismos”, inició en ese sentido un post en Facebook este miércoles 4 de noviembre, donde afirmó que, en parte, ese estallido no se ha producido porque el régimen “ha logrado hacer de una nación rebelde, un país con más jineteros que licenciados”.

“Duele el término, pero es la realidad”, sentenció Pupo, que ve un elemento probatorio de su aseveración en el hecho de que la mayoría de los jóvenes piense y vea en la emigración el principal método para su prosperidad.

“No importa si para ello tienen que perder su dignidad o venderle su cuerpo al mejor postor. Piénsalo, la joven quiere un yuma, el médico una misión, el pelotero un contrato en el exterior, el artista un intercambio cultural, los demás irse, ya sea brincando la selva o en chalupa”, resumió.

Esta situación lleva a preguntarse, subrayó Pupo, por qué muchos de los que migran o buscan hacerlo no tratan de cambiar las condiciones de su país. “La respuesta es mucho más fácil... Porque en Cuba el gobierno logró con sus atropellos y abusos que se perdieran los valores de toda una nación. El cubano hoy por hoy en su gran mayoría tiene más miedo que vergüenza”, ponderó.

Según interpreta el joven médico, la gran mayoría de los cubanos ha aprendido a vivir de expectativas nunca cumplidas. “El cubano vive de una fantasía tan grande como el mismo Socialismo autodestructivo. La gran mayoría cree que algún día alguien de afuera le resolverá su problema, la otra minoría cree que ya está en camino la solución desde dentro. Lo cierto es que los años pasan y ninguna de las dos vías se vuelve realidad”.

“El cubano sigue pobre, el gobierno sigue rico, los países siguen creyendo las mentiras que le cuentan sobre Cuba, y el futuro de la nación cada vez más incierto y sombrío”, concluyó, reafirmando la consigna con la que ha finalizado sus post de análisis y denuncia de la realidad cubana desde que se viera forzado a abandonar su carrera médica en un hospital del régimen: “La Revolución somos nosotros”.

Desde que decidiese hacer uso de su libertad de expresión y criticar públicamente todo lo que no comparte con el régimen cubano y el trato que da a sus médicos, Alexander Pupo ha sido víctima de campañas desmoralizantes y actos represivos y de censura que pueden terminar acabando con su carrera médica en Cuba.

Sin embargo, según ha dicho, él seguirá publicando todo lo que piensa y siendo “la espina en la sopa del opresor”, “la piedra en el zapato roto de la mentira”. 

Así lo hizo en su post más reciente, con el que no sólo desmiente al Granma, sino que también resume las ideas e interpretaciones más frecuentes en Cuba sobre por qué realmente el pueblo no busca un cambio que potencialmente mejore las condiciones socioeconómicas y el respeto a las libertades y derechos políticos y civiles en el país.

 

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