Una tormenta local severa azotó al municipio Puerto Padre, en la provincia de Las Tunas, ocasionando daños en los techos de 24 viviendas y en 244.32 hectáreas de cultivos.
El evento meteorológico afectó el sábado último los consejos populares de Maniabón y San Manuel, en Puerto Padre. Todavía a finales de esta semana, no se han restituido las cubiertas de las viviendas dañadas, según dijo Roberto Cabrera Sao, vicepresidente del Consejo de Defensa Municipal, a la emisora estatal Radio Libertad.
Para limitar el impacto destructivo de la tormenta, que arrasó cosechas de distintos cultivos, los pobladores del municipio se apresuraron en recoger el plátano vianda y burro, además de hortalizas, frutas, maíz y frijol caupí, derribados por los vientos.
Según fuentes oficiales, fueron unas 1 114 toneladas de alimentos que recuperaron en fincas empresas agrícolas del territorio localizadas en La Resbalosa, La Siguaraya, Guabineyón 2 y 4, San Ramón y Velazco 20.
La empresa estatal de Acopio, de mala fama entre los cubanos por corrupción e ineficiencia, comercializará los productos en mercados, aunque especifican que las ventas serán “de plátano burro fundamentalmente”.
La tormenta local severa llegó con lluvias y fuertes vientos. Dañó, además, unas 9 casas de cultivo tapado y el 30 por ciento de los semiprotegidos en La Siguaraya, además de naves de sombreado en el centro de Lombricultura de la Agricultura Urbana, que igualmente sufrieron los embates del fenómeno natural.
Lo campesinos, para tratar de amortiguar el golpe en una provincia aquejada, como toda Cuba, de una profunda escasez de alimentos, siembran ahora cultivos de ciclo corto como boniato, yuca y calabaza.
