El presidente cubano Miguel Díaz-Canel Bermúdez ofreció “solidaridad” a la Argentina y dijo sentir la presencia de Fidel Castro y el Ché Guevara, durante un discurso frente a cerca de 800 personas en la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad de Buenos Aires.
El mandatario comunista se encuentra en ese país del sur del continente cumpliendo una invitación para asistir a la toma de posesión del presidente electo Alberto Fernández.
Además de felicitar a la Argentina, al nuevo mandatario Alberto Fernández y a su compañera de fórmula y aliada fiel del castrismo, Cristina Fernández de Kirchner, Díaz-Canel aseguró que estaba convencido de que Fidel Castro y Ernesto Guevara (fallecidos líderes comunistas) estaban presentes en el encuentro.
“Quiero expresar un sentimiento personal con lo que ha venido pasando en este acto, con lo que ha venido pasando en este encuentro, yo estoy convencido de que aquí están presentes Fidel y el Che”, dijo el mandatario cubano, como una manera de inyectar “entusiasmo revolucionario” a la cita.
Sin embargo, sus palabras evocan más el fanatismo comunista que otra cosa, y hacen recordar casos de culto extremo a la personalidad, como cuando algunos fanáticos de Castro aseguraron ver su rostro en unas nubes del cielo, o cuando el dictador venezolano Nicolás Maduro dijo que había “visto a Chávez” en unas paredes manchadas del Metro de Caracas.
Díaz-Canel definió el acto de solidaridad como “entrañable y emotivo”, y el sitio oficial de la Presidencia de Cuba lo catalogó de “mágico encuentro”.
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El presidente de la Isla dijo también sentirse muy emocionado por estar por primera vez en Argentina, y aseguró los cubanos “profesamos especial cariño, prácticamente desde que nacemos”, a ese país. Según Díaz-Canel esta empatía viene de “los sonidos del tango, que desde siempre ha tenido sus espacios en casi todas las emisoras de Cuba”.
Luego del acercamiento emotivo, el mandatario cubano pasó a la propaganda: dijo que el hecho de ser Argentina el país natal de Ernesto Guevara, sería un signo del destino común de ese país y Cuba. Mencionó también del apoyo cubano a las abuelas y madres de la Plaza de Mayo, de la pasión por el fútbol, del cine latinoamericano, el rock en español y de la amistad personal entre Fidel Castro y Diego Armando Maradona.
Una reseña oficialista indica que Díaz-Canel se refirió “de manera especial”, a la visita de Castro a Argentina en el año 2003 con el propósito de asististe a la toma de posesión de Néstor Kirchner.
“Aquel era un contexto muy similar al que vivimos hoy. El pueblo argentino saludaba con alegría y esperanzas la llegada de Néstor a la Presidencia, (…) en tanto Cuba era amenazada por el Gobierno belicista del entonces presidente George W. Bush, empeñado en atacar lo que definió como ‘oscuros rincones del mundo’, entre los cuales nos incluía, al mismo tiempo que arreciaba el bloqueo”, dijo Díaz-Canel, y afirmó que “el pueblo cubano” no se dejaría amedrentar por la actual Administración de Trump.
A principios de diciembre, medios argentinos anunciaron que el dictador Raúl Castro Ruz, jefe del Partido Comunista y verdadero gobernante de la Isla, viajaría a Argentina con a la ceremonia de toma de posesión de Fernández. Sin embargo, el viaje no se ha confirmado hasta el momento de forma oficial.
